Médicos canadienses realizan la primera anestesia por videoconferencia del mundo

Un quirófano
EP
Actualizado: viernes, 10 septiembre 2010 20:30

MADRID 10 Sep. (EUROPA PRESS) -

Un equipo de anestesistas de la Universidad McGill, en Montreal (Canadá), han conseguido "dormir" por videoconferencia a un grupo de pacientes que iban a ser operados de tiroides en Italia, convirtiéndose en la primera teleanestesia que se realiza en todo el mundo.

Según han explicado los autores de esta innovadora intervención, todo ha sido posible gracias a que el equipo estaba compuesto por anestesistas e ingenieros y a su coordinación con el equipo de anestesistas de la Universidad de Pisa, Italia, donde se realizó la intervención.

De este modo, "tendrá aplicaciones obvias en países donde un número significativo de personas viven en zonas remotas, como Canadá, lo que dificulta que los anestesistas estén disponibles en todo momento", asegura Thomas Hemmerling, coordinador del equipo canadiense.

Para la administración de la anestesia, los médicos habían colocado cuatro cámaras de vídeo estratégicamente para controlar "a tiempo real" cada aspecto de la atención al paciente en Pisa.

Así, parámetros como el ritmo respiratorio, los signos vitales (ECG, frecuencia cardiaca, saturación de oxígeno) y las imágenes en directo de la cirugía eran supervisados cada uno por cada cámara, mientras que la cuarta se dejaba propósitos especiales.

Del mismo modo, fue necesario habilitar como una especia de cabina de piloto para la anestesia, en la que se regulaba la conexión de audio y video entre los dos centros.

Antes de la operación, además, se evaluó el estado de las vías respiratorias del paciente y su historial médico, también por videoconferencia.

"Obviamente, los anestesistas locales puede prevalecer sobre el proceso en cualquier momento", explica Hemmerling, quien valora positivamente el éxito de la operación y se muestra confiado en que pronto pueda hacerse extensivo a otras operaciones.

Los investigadores también están estudiando la posibilidad de realizar la evaluación preoperatoria de los pacientes en casa, aunque el hecho de requerir análisis de sangre u otras pruebas invasivas en otras cirugías puede dificultar esta propuesta.

Sin embargo, si aseguran que este hallazgo puede evitar a muchos pacientes viajes muy largos y horas de espera para ver a un anestesista que les hacen preguntas específicas, al tiempo que también minimizaría el estrés preoperatorio de los pacientes que llegan al hospital antes de la cirugía.

"Los siguientes pasos serán para confirmar los resultados de esta experiencia piloto con más estudios", dijo Hemmerling, que también ve un uso potencial a la hora de "enseñar a los residentes sin la presencia física de un tutor".