MADRID, 12 Feb. (EUROPA PRESS) -
Las tasas de hospitalización por accidente cerebrovascular y muerte pueden aumentar y descender con cambios en la temperatura ambiental y en el punto de condensación, según concluye un estudio presentado en la Conferencia International sobre Derrame Cerebral 2014, que se celebra del 12 al 14 de febrero en San Diego, California, Estados Unidos.
"El tiempo no es algo que la gente suele asociar con el riesgo de derrame cerebral, sin embargo, hemos encontrado que las condiciones climáticas son algunos de los múltiples factores que se asocian con hospitalizaciones por accidentes cerebrovasculares", afirma Judith H. Lichtman, autora principal del estudio y profesora asociada de Epidemiología en la Escuela de Salud Pública de la Universidad de Yale en New Haven, Connecticut, Estados Unidos.
Los investigadores identificaron una muestra nacional de 134.510 personas, mayores de 18 años, ingresados en los hospitales en 2009-2010 por accidente cerebrovascular isquémico (causado por un coágulo de sangre que bloquea el flujo sanguíneo en o que va al cerebro). Entonces, obtuvieron los datos de temperatura y punto de condensación durante ese periodo.
Los autores del trabajo hallaron que cambios diarios de temperatura y un punto de condensación alto (que indica mayor humedad del aire) se asociaron con mayores tasas de hospitalización con accidente cerebrovascular. Temperaturas medias anuales más bajas se asociaron con hospitalizaciones por accidentes cerebrovasculares y muerte.
Con cada aumento de 1 grado Farenheit (-17º C) de la temperatura media, hubo una disminución del 0,86 por ciento en las probabilidades de hospitalización por accidente cerebrovascular y una disminución del 1,1 por ciento en las posibilidades de morir en el hospital después del infarto cerebral.
El aumento de la fluctuación de la temperatura diaria y el punto de condensación medio se asociaron con mayores probabilidades de hospitalización por accidente cerebrovascular, pero no con la muerte en el hospital.
"Este estudio sugiere que los factores meteorológicos, como las fluctuaciones diarias de temperatura y el aumento de la humedad, pueden ser factores de estrés que aumentan las hospitalizaciones por accidentes cerebrovasculares", apunta Lichtman.
"Las personas en situación de riesgo para el accidente cerebrovascular pueden querer evitar la exposición a importantes cambios de temperatura y un elevado punto de condensación y estar preparados para actuar rápidamente si ellos o alguien que conocen experimentan signos y síntomas de accidente cerebrovascular", agrega, tras señalar la necesidad de más investigación para entender mejor la causa y el efecto de los cambios en las condiciones climáticas.