MADRID, 8 Sep. (EUROPA PRESS) -
Cada año se producen 6.500 visitas a urgencias y 1.300 ingresos hospitalarios como resultado de quemaduras; entre 50 y 80 personas fallecen en los hospitales cada año por estas lesiones, según el último Informe de Lesionados por Quemaduras en España de la Fundación Mapfre y de la Asociación Española de Quemaduras.
En cuanto al tratamiento y perfil del paciente, el informe señala que se practica una media de 1.400 intervenciones de cirugía reparadora al año para tratar a estos pacientes. Respecto a los afectados, el grupo etario con mayor incidencia es el de personas de entre 30 y 50 años. Las quemaduras graves, además, son más frecuentes en varones (casi un 63% de los afectados), en niños y adultos, excepto en el grupo de mayores de 65 años.
"La quemadura es el tipo de herida más complejo que existe, uno de los peores ataques que puede sufrir nuestro cuerpo y, en estos casos, el cirujano plástico no sólo repara en el sentido estético y funcional, sino que salva vidas", señala el doctor Enrique Monclús, coordinador de la Unidad de Grandes Quemados del Hospital Miguel Servet de Zaragoza y miembro de la Junta directiva de la Sociedad Española de Cirugía Plástica Reparadora y Estética (SECPRE).
Hay algunas quemaduras con perfil estacional. "En verano, la más frecuente es la que sufren algunos aficionados a la barbacoa, que puede llegar a ser grave. También en accidentes de tráfico y en incendios forestales pueden ocurrir. Incluso, son típicas las que se producen en motocicleta, por los tubos de escape, cuando el conductor va en pantalón corto. Hasta hemos llegado a tener ingresados pacientes por quemaduras solares graves", enumera.
En otros momentos del año, como el invierno, en zonas rurales, "se producen quemaduras por braseros y, en zonas en las que se hacen conservas, quemaduras por escaldaduras". Otras lesiones, como las derivadas de accidentes laborales, se producen durante todo el año.
ESPAÑA, UN REFERENTE EN LA ATENCIÓN
España, con 9 unidades de Quemados en los hospitales del Sistema Nacional de Salud, de las cuales seis son Centros, Servicios y Unidades de Referencia (CSUR) de quemados críticos, es uno de los países pioneros en Europa en cirugía de quemados. Todos estos centros forman una red asistencial que permite llevar a cabo las intervenciones necesarias en todas las víctimas de estos siniestros, con independencia del lugar donde se produzcan.
La mayoría de las personas que han sufrido estas quemaduras graves en superficies amplias de su organismo deben someterse a cirugía plástica reparadora para recuperar la funcionalidad y la calidad de vida tras un accidente de este tipo.
En estas unidades y servicios, los cirujanos plásticos son los profesionales responsables del equipo que atiende a unos pacientes especialmente vulnerables. "Nosotros lideramos los equipos interdisciplinares. Participan intensivistas, rehabilitadores, fisioterapeutas, enfermería con un papel muy importantE... pero el cirujano plástico es el que tiene que darle una piel nueva al paciente", asegura.