MADRID, 25 Ene. (EUROPA PRESS) -
Una nueva investigación ha encontrado que crecer en un hogar bilingüe puede proporcionar beneficios cognitivos inesperados más adelante en la vida, según publican sus autores en la revista 'Scientific Reports'.
El estudio demuestra por primera vez que los adultos que adquirieron su segundo idioma cuando eran niños pequeños (bilingües tempranos) son más rápidos para cambiar la atención y más rápidos para detectar cambios visuales en comparación con los adultos que aprendieron su segundo idioma más tarde en la vida (bilingües tardíos).
Dirigida por el doctor Dean D'Souza, de la Universidad Anglia Ruskin (ARU), en Reino Unido, la investigación incorporó a 127 adultos en dos experimentos separados. El primero implicó ver imágenes en una pantalla, una imagen que cambia gradualmente y la otra permanece igual. Los bilingües tempranos notaron estos cambios mucho más rápido que los tardíos.
El segundo experimento descubrió que los primeros bilingües controlaban mejor su atención. Específicamente, fueron más rápidos en desviar la atención de una imagen para cambiar su enfoque a otra.
El equipo había descubierto anteriormente que los bebés criados en hogares bilingües se adaptan a su entorno lingüístico más variado e impredecible al cambiar su atención visual con mayor rapidez y frecuencia. Los hallazgos de este nuevo estudio sugieren que estas adaptaciones adquiridas como bebés bilingües continúan hasta la edad adulta.
D'Souza, profesor titular de psicología en la Universidad Anglia Ruskin (ARU), resalta que "este estudio es una extensión interesante de esa investigación anterior, que sugirió que los bebés criados en hogares bilingües se adaptan a sus entornos lingüísticos más complejos cambiando la atención más rápido y con más frecuencia".
Según destaca, "esta adaptación puede ayudarlos a aprovechar múltiples fuentes de información visual, como los movimientos de la boca, las expresiones faciales y los gestos sutiles, lo que en última instancia les ayudará a aprender varios idiomas".
"Los hallazgos de nuestra nueva investigación con adultos bilingües sugieren que algunas de estas adaptaciones, incluida la rapidez para cambiar la atención, se mantienen hasta la edad adulta", asegura.