NUEVA YORK 22 Jun. (EUROPA PRESS) -
Científicos australianos han descubierto que beber leche desnatada en el desayuno ayuda a incrementar la sensación de saciedad del cuerpo, lo que repercute en que, a la hora de comer, se consuman hasta un 9 por ciento menos de alimentos.
En el estudio, publicado en el 'American Journal of Clinical Nutrition', 34 hombres y mujeres participaron en dos sesiones de prueba. En la primera, se les servía medio litro de leche desnatada, mientras que en la segunda se les servía la misma cantidad de un zumo de frutas, ambas bebidas con una aportación de 250 calorías.
Cuatro horas después se les permitió comer hasta que se sintieran satisfechos. Mediante esta prueba, los científicos descubrieron que aquellos sujetos que habían bebido leche desnatada se sentían llenos y más satisfechos antes incluso que los bebedores de zumo, lo que contribuía a que ingirieran menos calorías en la hora de la comida.
Según los investigadores, el contenido proteínico de la leche desnatada, la lactosa -el azúcar natural en este alimento- o simplemente su espesor juegan un papel esencial en la sensación de saciedad. Consumir alimentos que incrementen esta sensación es un factor clave a la hora de elaborar planes dietéticos, añaden.
En este sentido, los expertos nutricionistas estadounidenses se centran, a día de hoy, en lograr pequeños cambios de comportamiento diarios que contribuyan a combatir la obesidad. Consumiendo leche desnatada en el desayuno se pueden evitar 50 calorías diarias, la mitad de lo que, según estudios recientes, se cree que consume diariamente la población estadounidense.