Baleares.- Al menos 2.000 niños de Baleares padecen algún trastorno del espectro autista

Actualizado: viernes, 28 mayo 2010 20:23

PALMA DE MALLORCA, 28 May. (EUROPA PRESS) -

El 1 por ciento de los niños de Baleares padece algún Trastorno del Espectro Autista (TEA), lo que supone que unos 2.100 menores de edad sufren estas patologías en las islas, de los cuales la mitad tiene, además, enfermedades asociadas.

Los síntomas más comunes de este tipo de dolencias son las alteraciones cualitativas en el lenguaje, la comunicación y las interacciones sociales, así como la falta de juego simbólico, de imaginación y de patrones repetitivos.

Así lo explicó hoy el coordinador de la Unidad de Salud Mental Infantil y Juvenil de Baleares, Jaume Morey, en la presentación de unos cursos destinados a formar personal especializado para detectar y tratar a las personas afectadas por este tipo de trastornos.

Según Morey, emitir un diagnóstico acertado es "muy difícil" cuando se refiere a estas afecciones, por lo que los profesionales "deben estar bien formados".

Ante esta necesidad, la Asociación Asperger, el Govern y el Consell de Mallorca han organizado estas jornadas formativas, cuya finalidad es que los terapeutas de las islas aprendan a distinguir entre patologías parecidas.

En este sentido, Morey detalló que en estos cursos se formará a 44 profesionales en tres sesiones de tres días de duración, programadas para los próximos meses de septiembre, noviembre y diciembre de 2010.

El coordinador de Salud Mental Infantil explicó que, a partir de lo aprendido en las jornadas, el proceso que se seguirá para diagnosticar los diferentes tipos de trastornos contemplará entrevistas "muy detalladas" con los padres de los niños afectados; tests con los niños para observar cómo los hacen; y formación en los tratamientos psicológicos y educativos, en los que participarían psicólogos, pedagogos y trabajadores sociales.

Una vez detectadas e identificadas las patologías, los pacientes serán tratados por un Equipo de Evaluación de Dificultades Sociales, que se reunirá una vez al mes para consensuar las evaluaciones y evitar así que varios organismos emitan diagnósticos distintos de una misma persona.

Según Morey, "debe haber una vía única para evitar la confusión de los padres", puesto que al existir diversas instituciones que ofrecen diagnósticos diferentes las familias "están confusas y tienen incertidumbre y frustración".

En los casos más complejos y difíciles de tratar, los niños afectados serán tratados por profesionales "más especializados", que, según el coordinador de Salud Mental Infantil de las islas, constituirán el Equipo Terciario de Autismo.

Una vez finalizados los cursos, los profesionales accederán a una formación continuada, en la que podrán reciclar sus conocimientos mediante la asistencia a conferencias y cursos internacionales, a los que asistirán, según Morey, los equipos de Evaluación y Terciario.

Por su parte, la presidenta de la Asociación Asperger, Mercè Cànaves, explicó que las personas a las que representa "están desamparadas" y que la detección precoz de estas patologías "es la mejor manera de hacer frente al problema".