Los pueden solicitar personas con antecedentes familiares de cáncer, pero sólo se recomiendan en caso de poder ser intervenidos
MADRID, 6 May. (EUROPA PRESS) -
La futura automatización de los estudios genómicos que detectan el riesgo de padecer cánceres hereditarios en la población y sus nuevas aplicaciones para los pacientes serán algunos de los temas clave que debatirán, a partir de hoy y hasta el viernes, 8 de mayo, en Madrid, los cerca de 500 oncólogos que asisten al XII Congreso Nacional de la Asociación Española de Investigación sobre el Cáncer (ASEICA).
Así lo anunciaron hoy en la presentación de este congreso el profesor Eduardo Díaz-Rubio, presidente de ASEICA y también de este evento, y la doctora Trinidad Caldés, secretaria de esta asociación y miembro del comité científico del congreso, quien precisó que este tema se tratará mañana jueves, en el simposio titulado 'Diagnóstico Molecular en Cáncer', del que ella misma será la experta moderadora.
Según explicó la doctora Caldés, los estudios genómicos para detectar cánceres hereditarios se practican ya en diversos centros de referencia por todo el país --entre ellos el Hospital Clínico San Carlos de Madrid-- y su objetivo es averiguar, dentro de la población general, qué pacientes tienen más riesgo de desarrollar un tumor en el que estén implicados los denominados genes de susceptibilidad, es decir, aquellos implicados en los denominados cánceres hereditarios.
"Lo primero es seleccionar, dentro de la población general, quiénes tienen más riesgo por los antecedentes familiares. Luego, si cumplen una serie de criterios de inclusión, se realizan los test genéticos para descubrir si tiene los genes que realmente producen el cáncer o si tiene genes de susceptibilidad al cáncer", explicó.
"REALIZAR MÁS ESTUDIOS AL MISMO TIEMPO"
Esta detección se realiza a través de técnicas de secuenciación, basadas en la PCR o en la composición de base, que en estos momentos se están intentando automatizar con equipos de secuenciadores que, según la experta, "pueden realizar más estudios al mismo tiempo" que yendo personalmente realizando el análisis caso por caso.
Según Díaz-Rubio, una vez que se encuentra esta mutación y se descubre el riesgo de la persona de padecer un tumor hereditario --un tipo de cáncer que supone el 5% del total, siendo sobre todo de mama y colon--, el paciente puede ser sometido a cirugía para extirpar "determinados órganos en riesgo" como una "medida profiláctica".
Dice el experto que este tipo de test pueden ser solicitados por personas que teman, por sus antecedentes familiares, la posibilidad de desarrollar un determinado tumor; por médicos de Atención Primaria que detecten este riesgo en alguno de sus pacientes, o por el propio oncólogo cuando detecte un caso sospechoso, como por ejemplo el de mujeres que, rondando sólo los 30 años, tengan un cáncer de mama.
No obstante, advierte de que el Consejo Genético de la Unidad de Críticos del centro, responsable de la realización de estos análisis, sólo recomendará la realización de este test "todo con cargo a una posible intervención terapéutica" que salve al paciente, ya que, de lo contrario, "no tendría ningún interés alarmar a una familia".
"Si en un cáncer de mama, por ejemplo, identificamos a una persona con una determinada mutación, además de someterla a una mayor vigilancia, analizamos su riesgo de desarrollar la enfermedad y a partir de ahí, se pueden hacer incluso intervenciones profilácticas, quirúrgicas, de extirpación de ciertos órganos", concluyó.