La ausencia de biomarcadores específicos afecta al tratamiento y diagnóstico de la esclerosis múltiple, según el experto

Publicado: viernes, 23 junio 2017 12:52

MADRID, 23 Jun. (EUROPA PRESS) -

"La ausencia de biomarcadores específicos que afecta tanto al pronóstico de la esclerosis múltiple como a la selección del tratamiento", ha destacado el jefe del Servicio de Neurología del Hospital Arnau de Vilanova de Lleida y presidente del Grupo de Enfermedades Desmielinizantes de la SCN, el doctor Lluis Brieva, durante la jornada 'Gestión de Recursos en la Esclerosis Múltiple: ¿Coste o Inversión?', celebrada en Barcelona la semana pasada.

La sesión se ha centrado en tres aspectos en lo que corresponde a la gestión sanitaria de la enfermedad: el modelo de atención a la patología y los requisitos asistenciales para un abordaje de calidad; el coste de la enfermedad, en concreto del brote de la patología, y la ayuda a la planificación e investigación que puede suponer la implementación del programa PADRIS, nuevo programa público de uso de datos de pacientes.

La evolución de la enfermedad demanda una atención sanitaria individual en cada fase, por ello "los fármacos que se utilizan son cada vez más selectivos, y por lo tanto más eficaces en la indicación correcta, pero no están exentos de posibles efectos secundarios. La monitorización estricta de la eficacia y de la seguridad son fundamentales tanto para valorar una respuesta subóptima como para detectar un acontecimiento adverso antes de que este sea irreversible", ha apuntado el doctor Brieva.

Aunque dicha evolución necesite una asistencia individualizada, la coordinación de los diferentes especialistas que intervienen en el proceso constituyen un papel fundamental en el desarrollo de la enfermedad. El doctor Brieva ha argumentado que "dentro del hospital la atención pivota sobre el tándem neurólogo y enfermería especializados en la enfermedad, pero debe haber una estrecha relación con el equipo de Resonancia, Farmacia y, desde el punto de vista clínico, con rehabilitación, Oftalmología, Urología, y Urgencias, dada la frecuente necesidad de su intervención".

Durante la jornadas los especialistas han revisado la necesidad de realizar estudios económicos sobre la EM, así como analizar la innovación terapéutica y su sostenibilidad en el futuro. Los expertos han tomado una decisión en común sobre el coste relacionado con el brote de la patología. Por ello, "la aparición de un nuevo brote puede conllevar a un cambio de tratamiento modificador de la enfermedad. El coste asociado a los tratamientos que disminuyen la probabilidad de que ocurra un nuevo brote pueden suponer un ahorro a más largo plazo, al evitar la ocurrencia de un nuevo brote del que se deriven mayores gastos", ha explicado la neuróloga del Hospital de Mataró, la doctora Virginia Casado.

Por otro lado, en el acto se ha hecho hincapié en la importancia de los 'big data' para ampliar el conocimiento y optimizar los procesos sanitarios, así como los límites existentes en cuanto a la confidencialidad y ética en el manejo de estos datos.

"Big Data permite la explotación exhaustiva e intensiva, y a un coste muy bajo, de grandes cantidades de información. Esto implica una aceleración de todos los procesos y un mayor control de la seguridad y eficacia de los tratamientos", ha argumentado el neurólogo del Hospital Universitario de Bellvitge, el doctor Sergio Martínez Yélamos.