Cada año se detectan más de 10 casos por cada 100.000 habitantes de este grupo de enfermedades cancerosas que se desarrollan en el sistema linfático
MADRID, 16 Jun. (EUROPA PRESS) -
La incidencia de las enfermedades hematológicas en España se ha mantenido en los últimos años aunque los linfomas, enfermedades cancerosas que se desarrollan en el sistema linfático, si que han auemtado y cada año se detectan entre 10 y 12 nuevos casos por cada 100.000 habitantes, según explicó el jefe de la Unidad de Hematología de la Clínica Quirón, José María Fernández Rañada, en el marco de la Semana Europea de la Leucemia, el Linfoma y el Mieloma.
Según este experto, la causa de dicho aumento no está especialmente clara y, en parte, puede deberse a "unos mejores medios de diagnóstico", dado que en los últimos años se han desarrollado técnicas de ecografía, tomografía axial computarizada, resonancia magnética nuclear y, más modernamente, el PET-TAC. Todas estas técnicas permiten una mejor detección de linfomas "antes muy poco accesibles a la exploración clínica".
Además, "también tiene algo que ver el sida", advirtió el doctor Fernández Rañada en declaraciones a Europa Press, ya que se mantiene el número de infectados por VIH que, al ser inmunodeprimidos, a su vez son más susceptibles de desarrollar algún tipo de tumor como el sarcoma de Kaposi o algunos tipos de linfoma, sobre todo de no hodgkinianos (LNH).
El resto de enfermedades hematológicas, por su parte, mantienen su incidencia de los últimos años y, así, cada año se detectan una media de 7-8 casos de leucemia por cada 100.000 habitantes y año, mientras que los mielomas afectan a alrededor de 4-5 pacientes por cada 100.000 habitantes.
Además, cada variante de estas enfermedades tienen un grupo de edad concreto de incidencia, dado que las hay más "típicamente infantiles" como la leucemia aguda linfoblástica, de la que el 80 por ciento de los casos se dan en niños de entre 2 a 15 años; mientras que hay enfermedades típicas de la edad media, como leucemia mieloide crónica, que aparece a partir de los 40 años; y otras como la leucemia linfática crónica o el mieloma múltiple o algunas variedades de linfomas que son más típicas en ancianos y "se detectan ya en edad avanzada".
LOS TRATAMIENTOS "CADA DÍA MEJOR PERO TODAVÍA NO MUY BUENOS"
Ante esta variabilidad es difícil comparar los resultados terapéuticos que se obtienen en cada área pero, en líneas generales, "los tratamientos están cada día mejor pero no son suficientemente buenos", matizó este experto.
"El tratamiento ha mejorado de forma sustancial", según el doctor Fernández Rañada, con quimioterapias innovadoras, mejoras en la radioterapia, desarrollo de anticuerpos monoclonales o técnicas de trasplante de médula ósea o de células progenitoras de la sangre periférica, tanto con carácter alogénico --mediante un donante-- o de forma autóloga utilizando las propias células del paciente.
Esto ha ofrecido grandes avances terapéuticos "pero sigue sin haber cura para muchas situaciones". Las patologías donde hay el abordaje terapéutico es más eficaz son la leucemia linfoblástica infantil, que se cura en un 80 por ciento de los casos; o en la leucemia aguda en adultos también se ha avanzado en su curabilidad; y en la mieloblástica, de la que entre el 20 y 50 por ciento de los casos puede curarse.
En cambio, en otras enfermedades las terapias innovadoras han aumentado el número de respuestas o la supervivencia pero no ofrecen una cura definitiva. A pesar de todo, la preparación de los profesionales del Sistema Nacional de Salud (SNS) en el campo de Hematología es "excelente y comparable a los resultados que se obtienen en otros países europeos".