OVIEDO, 1 Mar. (EUROPA PRESS) -
Varios expertos en medicina, así como el Fiscal Antidroga del Principado, José Perals, han abogado este martes en la Junta General por incrementar de 16 a 18 años la edad legal de acceso a la compra y consumo de alcohol en el Principado e igualarla así al resto de las comunidades del país; así como por la puesta en marcha de medidas que garanticen dicha normativa.
Así lo han destacado en la Comisión de Salud y Servicios Sanitarios el Fiscal Antidroga de Asturias, José Perals; el doctor catedrático de Psiquiatría de la Universidad de Oviedo y jefe de Salud Mental del Área IV, Julio Bobes García; del profesor titular, Departamento de Psicología de la Universidad de Oviedo perteneciente al Grupo de Conductas Adictivas de la Universidad, José Ramón Fernández Hermida y el representante del Colegio Oficial de Médicos de Asturias, Eduardo Carreño.
Todos ellos han mostrado su opinión y la de los colectivos a los que representan sobre el borrador del Plan sobre Drogas del Principado 2010-2016 y todos ellos han coincidido en que el Principado debe de dejar de ser la única comunidad autónoma del Estado con la edad mínima legal de acceso al alcohol a los 16 años y no a los 18.
En este sentido, José Perals ha defendido esta idea "desde un criterio únicamente jurídico" y ha destacado que la Ley vigente en Asturias sobre el acceso de los jóvenes al alcohol es de 1990, momento en el que esa edad coincidía con la edad penal. Por ello ha indicado que en estos momentos "sería congruente desde el punto de vista jurídico" establecer el límite de edad de acceso al alcohol en los 18 años, edad similar a la edad penal. "Es evidente que el contacto con el alcohol conlleva incremento de la delincuencia de ciertos delitos", ha añadido Perals.
También los expertos médicos que han comparecido han coincidido en esta idea. Así, Julio Bobes ha insistido en lo adecuado de subir la edad de acceso a las bebidas alcohólicas y ha destacado que el fracaso escolar está claramente asociado con la presencia, uso o abuso de sustancias.
"Hay razones fundamentales para abogar por este incremento de la edad. Una son los rendimientos cognitivos en el colegio de los alumnos y otra el desarrollo cerebral de nuestros jóvenes; son dos motivos para impedir que nuestros jóvenes estén sometidos constantemente a relación con sustancias. La edad debe ser retrasada e igualada a la de otras comunidades", ha dicho Bobes.
Similar fue la opinión del profesor José Ramón Fernández Hermida, que ha incidido en el problema que la región presenta respecto al consumo de alcohol entre jóvenes de 14 a 18 años con cuotas superiores a la media estatal. Ha dicho que Asturias está entre las regiones con mayor consumo de alcohol, un problema relativamente grave porque el consumo diario de alcohol empieza antes.
Por ello también ha defendido el incremento de la edad de los 16 a los 18 años, pero ha destacado e insistido en que no basta con aprobar una norma legal si luego no se arbitran las medidas necesarias para cumplirlas, como promover espacios libres de consumo o establecer las medidas para detectar el incumplimiento de la norma.
En este sentido ha recordado que en la actualidad ya se incumple la normativa, ya que son cada vez más los jóvenes menores de 16 años los que consumen alcohol de manera habitual.
MÁS PREVENCIÓN
Otro de los aspectos destacados por los comparecientes ha sido la necesidad de una apuesta mayor por la prevención; así como el tratar a los drogodependientes como enfermos y no como delincuentes.
"El drogadicto no es un delincuente y la Fiscalía lleva años tratando de eliminar esa comparación", ha dicho Perals, que ha considerado esencial en el nuevo plan el potenciar el apoyo a la UTE de Villabona, como una zona libre de drogas real y el aumentar el número de personas en programas alternativos a la privación de libertad, similares a Proyecto Hombre.
En este sentido el representante del Colegio Oficial de Médicos del Principado, Eduardo Carreño, ha dado la opinión de su colectivo sobre un plan que a su juicio debería cambiar su denominación y en lugar de hablar de un Plan sobre drogas debería hablarse de un plan sobre drogodependencia, de tal manera que esa denominación rija todo el documento y se hable siempre de una enfermedad o trastorno mental.
"Hemos esperado ocho años por este borrador que se nos presenta a tres meses de elecciones, así que creo que esperar más y tomar este borrador como punto de partida de un documento más amplio que cuente con la participación de todos y que se apruebe por la Cámara que salga de las próximos elecciones", ha dicho.
Así, el representante del Colegio de Médicos ha asegurado que en dicho borrador se echan en falta algunos aspectos, entre ellos una mayor apuesta por la prevención, que a su juicio debería ser aspecto central. Así recordó que por cada euro que se gasta en prevención se ahorran ocho en tratamiento.
Bobes ha reclamado también más programas de prevención, pero ha insistido en que los planes carecen de un análisis y evaluación más profundo. "No se puede seguir invirtiendo en medidas que no se ha demostrado ser efectivo. La prevención debe ir bien dotada pero para aquellas medidas que han demostrado ser efectivas, así que hay que mejorar las evaluaciones, llevarlas más allá de la evaluación interna que suele ser más sesgada", ha dicho.