OVIEDO 29 Mar. (EUROPA PRESS) -
En Asturias se diagnostican cada año alrededor de 500 casos nuevos de cáncer de próstata y los especialistas hacen hincapié en la importancia del diagnóstico precoz mediante la realización de un chequeo y el análisis en sangre del PSA (antígeno prostático específico) en hombres a partir de los 50 años, mientras que si existen antecedentes familiares, se recomienda a los 40.
Para tratar esta enfermedad, el Hospital Universitario Central de Asturias realiza intervenciones de braquiterapia prostática a sus pacientes al mismo tiempo que ofrece cursos prácticos de formación a los especialistas implicados en el tratamiento del cáncer de próstata con la colaboración de la compañía biofarmacéutica AstraZeneca.
"El Hospital Universitario Central de Asturias lleva a cabo unas 400 intervenciones de braquiterapia prostática al año, fue el primer centro en realizar una operación de este tipo hace más de 11 años y somos pioneros en desarrollar esta técnica", explica el Dr. Pedro José Prada,
El responsable del Área de Braquiterapia Urológica y Digestiva del Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA), Pedro José Prada, recordó que ese complejo fue el primero en desarrollar una braquiterapia prostática, hace más de 11 años. A día de hoy se realizan anualmente unos 400 intervenciones.
Prada apuesta por estos cursos prácticos que se llevan a cabo por la colaboración del Hospital Universitario Central de Asturias y la Facultad de Medicina de la Universidad de Oviedo y asegura que su finalidad es "enriquecer la oferta teórica ya existente, contribuyendo con ello a la mejora de la formación de los especialistas en el uso de este tipo de tratamientos, lo que todo ello redunda en un gran beneficio para los pacientes".
"La braquiterapia es el tratamiento radioterápico que consiste en la colocación de fuentes radiactivas dentro del tumor, por lo que un beneficio inmediato es que al meternos dentro del tumor podemos llegar a dar dosis altísimas, y como los tumores son dosis-dependientes, cuanta más dosis, mayor es el porcentaje de curación", aseguró Prada. La otra ventaja, añade, es que al actuar dentro del tumor, no tratan ni dañan el resto de tejidos sanos, por lo que las complicaciones son menores.
En los pacientes con cáncer de próstata de bajo riesgo el porcentaje de curación alcanza el 95 por ciento, mientras que en aquellos con un tumor de alto o intermedio riesgo la curación oscila entre el 80 por ciento y el 90 por ciento, indicó.