OVIEDO 16 Abr. (EUROPA PRESS) -
El 10% de la población asturiana mayor de 40 años sufre la Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica (EPOC), sin embargo, el 80% de los afectados desconoce que la tiene. Además, según algunos estudios, sólo el 11% de los asturianos sabe en qué consiste esta enfermedad y muchos no la relacionan con el tabaco, cuando éste es el causante del 90% de todos los casos.
Éstos son datos que se han abordado hoy durante la reunión 'EPOC, la necesidad de un cambio', celebrada en Oviedo y organizada por los Laboratorios AstraZeneca, donde los neumólogos han recordado que el desconocimiento sobre la enfermedad deriva en problemas de infradiagnóstico. Asimismo, los especialistas se han puesto de acuerdo a la hora de concretar el futuro del tratamiento de la EPOC: éste se basará en tratamientos "a la carta" ajustados a las necesidades de cada paciente.
Durante la reunión, los neumólogos han puesto sobre la mesa los datos más llamativos. En España, la prevalencia de EPOC también ronda el 10% de la población mayor de 40 años y, según el INE, cada año se producen unas 30.000 muertes por esta enfermedad en nuestro país.
En Asturias, pese a que la EPOC es la cuarta causa de ingreso hospitalario, el 11% de la población asturiana desconoce el origen y las consecuencias de esta enfermedad. De hecho, los asturianos no relacionan esta patología con el hábito de fumar, cuando éste origina el 90% de los casos de EPOC. A raíz de este desconocimiento surge el infradiagnóstico: entre el 78 y el 80% de la población asturiana con EPOC no sabe que la padece.
"El reconocimiento del tabaco como causa de la EPOC contribuiría al mejor conocimiento de esta enfermedad por parte de la sociedad, lo que ayudaría al paciente a detectar su propia enfermedad y conducirle hasta el especialista", explicó la doctora Teresa González Budiño, del Servicio de Neumología del Hospital Central de Asturias, quien ha manifestado que tan sólo el 9% de los españoles y el 10% de los fumadores declaran conocer esta enfermedad.
Esta experta reiteró que la mayoría de las personas con EPOC son o han sido fumadoras. "El tabaco es la causa del 90% de los casos, el 10% restante es secundario a otros factores etiológicos como la contaminación ambiental, la exposición profesional u origen genético", ha señalado.
En cuanto al futuro del tratamiento de la EPOC, los expertos han llegado a un consenso. "Se trata de una enfermedad con repercusión sistémica en la que cada paciente tiene unas características diferentes; por ello, el futuro de su tratamiento pasará por la disponibilidad de fármacos que se adecuen a las necesidades de cada individuo", ha asegurado la doctora González.
En su opinión, actualmente ya existe una tendencia al tratamiento individualizado de los enfermos o, lo que es lo mismo, un tratamiento "a la carta". Aún así, "se necesitan más fármacos que se ajusten a las exigencias y particularidades personales de cada paciente para obtener mejores resultados", añadió.
La doctora González recordó que "hoy en día, para el tratamiento de la EPOC, se dispone de fármacos muy eficaces, que no sólo alivian los síntomas, sino que también mejoran el curso de la enfermedad". Los corticoides inhalados junto con los broncodilatadores son los medicamentos de elección. "Se ha demostrado que la utilización de estos fármacos en pacientes con EPOC moderada-grave disminuye el número de agudizaciones, lo que a su vez contribuye a un mejor control de la enfermedad", ha subrayado
Por último, los neumólogos reunidos en Oviedo hicieron hincapié en la prevención de la enfermedad. "El abordaje de la EPOC comienza en la prevención, es imprescindible informar y difundir la importancia de no iniciarse en el hábito de fumar por los efectos tan nocivos que tiene el tabaco en la función pulmonar", declaró la neumóloga.
En el caso de las personas que presentan ya esta patología, "es imprescindible dejar de fumar, porque es la única manera de detener su desarrollo y progresión", matiza. Por último, si la enfermedad está avanzada, "es necesaria la administración de fármacos que ayuden a aliviar los síntomas y mejoren las expectativas de vida", concluyó.