MADRID, 6 Jun. (EUROPA PRESS) -
El doctor John Peever, de la Universidad de Toronto, en Canadá, ha estado trabajando para responder a una de las preguntas más importantes de la humanidad: ¿cómo soñamos? Y ha encontrado que cierta área del cerebro es responsable de este fenómeno y que los problemas con el sueño normal pueden ser una señal de advertencia temprana para dolencias como la enfermedad de Parkinson, como expuso en la Reunión Canadiense de Neurociencias de 2017, la reunión anual de la Asociación Canadiense de Neurociencias.
Desde la década de 1960, se ha sabido que el tronco encefálico está involucrado en controlar el acto de soñar durante el sueño del Movimiento Rápido de los Ojos (REM, por sus siglas en inglés). El doctor Peever ha encontrado desde entonces las células responsables del estado de sueño y su equipo ha aprendido a controlar estas células en roedores y en el proceso de sueño. Peever señala: "Cuando activamos estas células, provocamos una rápida transición al sueño REM".
Con este conocimiento en la mano, su equipo ha examinado las disfunciones del sueño, como el trastorno del comportamiento del sueño REM en los seres humanos. Increíblemente, estos investigadores han desvelado un enlace a un cierto grupo de enfermedades neurodegenerativas.
"Hemos observado que más del 80 por ciento de las personas que sufren de trastorno del sueño REM eventualmente desarrollan sinucleinopatías, como enfermedad de Parkinson y demencia de cuerpos de Lewy. Nuestra investigación sugiere que los trastornos del sueño pueden ser un signo de alerta temprana para las patologías que pueden aparecer unos 15 años más tarde en la vida", detalla.
Peever espera que su investigación lleve a una estrategia neuroprotectora. "Al igual que vemos en las personas propensas al cáncer, el diagnóstico de los trastornos REM puede permitirnos proporcionar a los individuos acciones preventivas para mantenerlos sanos mucho antes de que desarrollen estas enfermedades neurológicas más graves". Esta meta tardará años en desarrollarse, pero podría un día ayudar a miles de personas a vivir vidas más sanas mucho antes de que necesiten atención médica seria.