Así condiciona el lupus eritematoso condiciona el desarrollo del embarazo

Archivo - Embarazada mirando una ecografía.
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Publicado: viernes, 28 abril 2023 8:07

MADRID, 28 Abr. (EUROPA PRESS) -

Las madres con lupus eritematoso sistémico (LES), un trastorno autoinmune de larga duración, corren más del doble de riesgo de dar a luz a un bebé prematuro o con retraso del crecimiento, según una auditoría nacional de 10 años de registros de ingresos hospitalarios en Estados Unidos, publicada en la revista de acceso abierto 'RMD Open'.

Además, estas madres tienen casi 4 veces más probabilidades de necesitar una transfusión de sangre y 15 veces más de sufrir insuficiencia renal durante el parto que las madres que no padecen esta enfermedad, según la auditoría.

Según los investigadores, las tasas de mortalidad y enfermedades graves entre las madres primerizas están aumentando en Estados Unidos, probablemente debido al incremento de las tasas de obesidad, las enfermedades subyacentes y la mayor edad de la madre.

Pero, a pesar de las pruebas de que las muertes maternas y fetales han disminuido entre las mujeres con LES, no está claro si las tasas de enfermedades graves también han disminuido en comparación con las mujeres sin la enfermedad.

En un intento por averiguarlo, los investigadores recurrieron a los datos de la Muestra Nacional de Pacientes Hospitalizados (NIS, por sus siglas en inglés) para el período comprendido entre 2008 y 2017. La NIS es la mayor base de datos de pacientes hospitalizados a disposición del público en Estados Unidos y contiene información sobre más de 7 millones de estancias hospitalarias al año, representativas de más de 35 millones de ingresos.

Entre 2008 y 2017 se estima que 51.161 (basado en cifras no ponderadas de 10.297) mujeres embarazadas con LES fueron ingresadas en el hospital para dar a luz a sus bebés.

Las mujeres con LES tendían a ser mayores (30 vs 28), de raza afroamericana (25% vs 15%) y más propensas a recibir Medicare (5% vs casi 1%) que las mujeres sin la afección.

La mayoría fueron tratadas en un hospital universitario urbano y atendidas en un hospital de tamaño mediano o grande. Y un número significativamente mayor de ellas tenía enfermedades coexistentes, según el Índice de Comorbilidad de Elixhauser (45,5% frente a 4%).

Las embarazadas con LES tenían 3 veces más probabilidades de sufrir eclampsia o coagulación sanguínea anormal en los vasos sanguíneos (coagulación intravascular diseminada), y más probabilidades de tener problemas médicos generales. Y tenían 11 veces más probabilidades de sufrir trastornos cardiovasculares y vasculares periféricos.

Durante el parto, tenían unas 15 veces más probabilidades de sufrir insuficiencia renal aguda y 4 veces más probabilidades de necesitar una transfusión de sangre o padecer trastornos cerebrovasculares.

Sus bebés también tenían más probabilidades de sufrir retraso del crecimiento (8% frente a casi el 3%) y nacer prematuros (14,5% frente al 7%) que los de madres sin LES.

"A pesar de los grandes esfuerzos realizados a lo largo de los años, sigue existiendo un riesgo considerable de complicaciones tanto maternas como fetales", afirman los investigadores.

"Nuestro estudio demuestra que la morbilidad fetal y la morbilidad materna grave se producen en mayor proporción en pacientes con LES en comparación con las que no lo padecen --destacan--. Este trabajo cuantitativo puede ayudar a informar y aconsejar a las pacientes con LES durante el embarazo y la planificación".