BARCELONA 19 Mar. (EUROPA PRESS) -
El Hospital Sant Pau de Barcelona ha aplicado una intervención pionera en España que consiste en la aplicación de calor en los bronquios, en una operación muy similar a la "ablación" por arritmias, a través de la introducción de un catéter por vía endobronquial para tratar a los pacientes con asma grave, según ha anunciado este lunes el adjunto del Servicio de Neumología del centro, Alfons Torrego.
En rueda de prensa, Torrego ha señalado que la técnica de la termoplastia se ha utilizado con éxito en cinco pacientes durante los meses de otoño de 2012, en una operación ambulatoria que, por razones de seguridad, se lleva a cabo en tres sesiones, en las que se va aplicando calor, generado por un aparato de radiofrecuencia, a todos los bronquios de los pulmones.
La operación "no requiere ninguna incisión, porque el acceso al pulmón se hace a través de la boca o de la nariz", utilizando los orificios respiratorios naturales, ha señalado Torrego, acompañado del director del Servicio de Neumología del Sant Pau, Vicente Plaza, quien ha indicado que la técnica también es una de las primeras veces que se aplica en Europa.
Como ha señalado Torrego, este tratamiento tiene una eficacia estimada de cinco años, de los que todavía no ha pasado el periodo de evaluación suficiente, y pese a que la terapia no ataja "la causa real del asma, hace que los pacientes mejoren su calidad de vida".
El objetivo es "disminuir la contracción muscular de los bronquios", que causa el estreñimiento del paso del aire, y, por tanto, mejorar los episodios de broncoespasmo que causan las crisis de ahogo y los síntomas del asma, ha explicado Torrego.
La primera paciente operada con esta técnica, Joana, de Sort (Lleida), ha destacado que ya de resultas de la primera sesión se sintió así: "Es como si me hubieran quitado un tapón de encima, y cada día mejor".
Maria, de Prats de Rei (Barcelona) se ha convertido en la segunda paciente de esta técnica en el Sant Pau, que prevé intervenir a una decena de enfermos graves de asma al año, y ha resaltado que desde que está intervenida no ha tenido que recurrir al inhalador de rescate por una crisis grave, que antes sufría de forma diaria en varios momentos del día.
La operación no libera a los pacientes de "suprimir la medicación" rutinaria de la enfermedad, que deben seguir tomando mañana y noche, pero sí que les evita recurrir al tratamiento de rescate y también acudir a los servicios hospitalarios por este tema, ha significado el neumólogo.
De los dos millones de españoles que sufren asma --300.000 catalanes-- se calcula que 80.000 sufren asma grave, representando el 4,5% de todos los asmáticos, ha señalado Plaza, quien ha revelado contactos con hospitales de Madrid y Valencia para mostrar la técnica.
NO TODOS LOS ASMÁTICOS GRAVES PUEDEN
Torrego ha señalado que no todos los pacientes con asma incurable son candidatos a someterse a una intervención de estas características, y ha descartado a los que sufren asma junto a otras patologías y los que fuman.
La intervención, para la que no hay evidencia que se deba repetir pasados cinco años, provoca escasos efectos secundarios, limitándose a tos persistente, mucosidad e irritación el mismo día de la operación, en que el paciente ya puede ir a su casa.
Los médicos han descartado también a los pacientes con asma no grave, porque éstos con los tratamientos médicos adecuados pueden llevar a cabo una vida normal, pueden, incluso, hacer deporte, ha observado Torrego.