Las alteraciones en el microbioma intestinal pueden aumentar el riesgo de TDAH en niños

Archivo - Reproducción de microbiota intestinal.
Archivo - Reproducción de microbiota intestinal. - SCIENCE PHOTO LIBRARY - Archivo
Publicado: lunes, 10 abril 2023 13:15


MADRID, 10 Abr. (EUROPA PRESS) -

Un estudio realizado por investigadores taiwaneses ha demostrado que unos niveles más altos de algunos microbios en el intestino aumentan el riesgo de que los niños padezcan el trastorno por déficit de atención con hiperactividad (TDAH).

En su estudio, publicado en la revista científica 'Journal of Child Psychology and Psychiatry', han descubierto que los niños con TDAH tenían niveles más altos de algunas especies de hongos y más bajos de otras, lo que apunta a una relación entre el trastorno y la salud intestinal.

El intestino humano alberga un gran número de microorganismos, como bacterias, virus y hongos. Sin embargo, la cantidad de cada uno de ellos varía de una persona a otra.

Tras estudiar muestras fecales de 35 niños con TDAH y 35 sin TDAH, el equipo de investigación taiwanés descubrió que los que padecían TDAH tenían niveles más altos de ciertas especies de hongos y niveles más bajos de otras.

La presencia del hongo 'Candida albicans' era más común en los que padecían el trastorno y también creaba un "intestino permeable" que permite la entrada de bacterias en el torrente sanguíneo. Esta filtración provoca inflamación en todo el cuerpo y el cerebro, lo que puede desencadenar el TDAH.

"El cuerpo humano alberga un ecosistema microbiano complejo y diverso, y los hallazgos de este estudio sugieren que la disbiosis del micobioma fúngico en el TDAH puede influir en la salud del paciente", han detallado los autores del estudio.

El TDAH es un trastorno común del neurodesarrollo que afecta al comportamiento de las personas. Quienes lo padecen suelen ser inquietos, tienen problemas de concentración y a veces actúan de forma impulsiva. El TDAH afecta a uno de cada 16 niños y adolescentes en todo el mundo.

El TDAH puede desarrollarse a partir de una fisiopatología multidimensional, que incluye las vías de señalización bidireccionales entre el cerebro y el intestino. Se ha propuesto que el 'eje intestino-cerebro', que hace referencia al vínculo entre la función intestinal, la microbiota intestinal y el sistema nervioso central, está relacionado con varios trastornos neuropsiquiátricos.

Los participantes en este estudio tenían alrededor de 10 años y algo más de la mitad eran varones. En primer lugar, el equipo recogió muestras de ADN total de cada muestra fecal. A continuación, utilizaron la secuenciación de amplicones ITS y la clasificación taxonómica de hongos para revelar los microorganismos que vivían en el intestino.

En los participantes sanos, el filo dominante era 'Ascomycota'. Le siguieron 'Basidiomycota' y 'Mucoromycota'. 'Ascomycota' y 'Basidiomycota' también estaban presentes en los afectados por TDAH, pero los niveles de 'Ascomycota' eran significativamente mayores, mientras que la cantidad de 'Basidiomycota' era mucho menor.

'Candida albicans' era el hongo más abundante en el intestino y sus niveles eran mucho más elevados en las personas con TDAH. Era este hongo el que era capaz de amortiguar la barrera intestinal humana, provocando fugas intestinales.