MADRID, 2 Ago. (EUROPA PRESS) -
El servicio de Otorrinolaringología del Hospital Universitario de Torrejón ha advertido de factores propios de la etapa estival, como son las altas temperaturas y la sequedad en el aire, unidos a una mayor exposición solar, que pueden hacer que los vasos sanguíneos de la nariz se dilaten, pudiendo romperse y provocar sangrados repentinos.
Por lo general, las hemorragias nasales suelen ser autolimitadas y se controlan con taponamientos, pero en ocasiones se necesita realizar un control quirúrgico del punto de sangrado y hasta pueden llegar a producir anemias o shocks hipovolémicos.
"Estos episodios de hemorragias nasales, técnicamente conocidos como epistaxis, son frecuentes debido a la cantidad de arterias y venas que confluyen dentro de la nariz", ha indicado jefa del servicio de Otorrinolaringología del Hospital Universitario de Torrejón, Lorena Sanz.
Además, la especialista ha apuntado que se pueden producir con una mayor asiduidad si se presentan cifras elevadas de presión arterial, si existe la presencia de varices en la nariz y si se toman fármacos anticoagulantes o antiagregantes. De este modo, las personas en avanzada edad, aquellas que utilizan CPAP (presión positiva continua de las vías respiratorias) para mantener las vías respiratorias abiertas al dormir y las que se tratan con oxigenoterapia a través de gafas nasales tienen más probabilidades de sufrir episodios de sangrado nasal.
"La gravedad o no del sangrado viene dada por el volumen, la duración, la recurrencia y la ubicación del mismo. Por lo general, las epistaxis suelen ser autolimitadas y se controlan con taponamientos nasales, pero en ocasiones se necesita realizar un control quirúrgico del punto de sangrado porque pueden llegar a producir anemias o shocks hipovolémicos", ha añadido.
Ante una hemorragia nasal, la especialista recomienda mantener la calma, no colocar la cabeza hacia atrás, taponar la fosa nasal afectada con un algodón embebido en agua oxigenada y respirar por la boca. "Hay que comprimir la fosa nasal taponada entre 10 y 15 minutos, pero si el sangrado no cede durante ese tiempo hay que acudir a un centro de Urgencias", ha aconsejado Sanz.
Por último, la jefa del servicio de Otorrinolaringología del Hospital Universitario de Torrejón ha apuntado a que existen ciertas recomendaciones para tratar de prevenir estas hemorragias. Entre ellas, se aconseja tratar de protegerse del sol, evitar la exposición prolongada a altas temperaturas, hidratarse con al menos dos litros de agua al día y llevar una dieta rica en Vitamina C y K, con frutas y verduras. Además, se recomienda evitar esfuerzos físicos intensos en las horas de más calor del día y los entornos con polvo o humo, que resecan la nariz.