MADRID 16 Mar. (EUROPA PRESS) -
Alrededor del 50 por ciento de las mujeres y del 20 por ciento de los hombres de más de 50 años sufrirán una fractura por fragilidad, según han señalado expertos en un curso organizado recientemente por la Sociedad Española de Columna Vertebral y la Sociedad Española de Rehabilitación y Medicina Física (SERMEF).
De hecho, buscar un consenso multidisciplinar en el abordaje integral de las fracturas vertebrales osteoporóticas ha sido el objetivo principal del curso organizado por la que reunió en Madrid el pasado 11 de marzo a distintos especialistas implicados en el tratamiento de los pacientes que sufren esta patología, como traumatólogos, reumatólogos, rehabilitadores y geriatras.
"Existe una variabilidad en el manejo y tratamiento de la fractura vertebral osteoporótica por la atomización de cada especialidad, que trata al paciente desde su ámbito, pero no se hace de forma transversal. Es muy importante estudiar los motivos que provocan la FVO, implicando a reumatólogos, internistas especializados en el metabolismo óseo y rehabilitadores, para mejorar la calidad de vida de los pacientes", ha dicho el vicepresidente de la Sociedad Española de Columna Vertebral y uno de los co-directores de este curso, Luis Álvarez Galovich.
Este tipo de fractura vertebral afecta principalmente a las mujeres, tras alcanzar la menopausia, ya que disminuyen sus niveles estrogénicos y se producen desarreglos en su metabolismo óseo. Sin embargo, en los últimos años se ha observado un aumento de su incidencia en varones. Esta patología deteriora la calidad de vida de los pacientes, aumenta el gasto sanitario e, incluso, la mortalidad, como indican varios de los estudios que se han presentado en el curso.
"Un paciente con FVO tiene una tasa de visita al hospital 5 veces superior comparado con la población general. Por eso es fundamental concienciar sobre la prevención, identificar a esos pacientes que se encuentran en un elevado riesgo de fracturas, y realizar un tratamiento adecuado una vez se produzca la fractura, que evite encamar innecesariamente a los pacientes, y les permita reincorporarse a sus actividades habituales lo antes posible", ha apuntado Álvarez.
La vitamina D es la gran protectora de los huesos, y el sol es uno de sus principales productores. En España, a pesar de ser un país con una alta cantidad de horas de sol al año, los niveles de vitamina D que presenta su población son más bajos que en otros países europeos (por la protección frente a la exposición solar y no complementar con suplementos dietéticos la falta de esta vitamina).