MADRID 8 Sep. (EUROPA PRESS) -
Alrededor de un 30 por ciento de los niños en España sufrirá a lo largo del curso que arranca este mes de septiembre la temida pediculosis, o lo que es lo mismo, la presencia de los molestos piojos, favorecida por la masificación de los niños en las aulas.
Estas observaciones se derivan del estudio 'Percepción de la pediculosis en los hogares españoles', realizado por el centro de erradicación de piojos Head Cleaners, según el cual 9 de cada 10 padres aseguran que el lugar donde más se transmiten estos insectos es el colegio.
En declaraciones a Europa Press TV, la directora de esta empresa especializada en la eliminación de piojos y liendres, Laura Martín, ha explicado que según sus estimaciones "en la población infantil hay un 30 por ciento de los niños que en edad escolar se infectan de piojos durante el año".
En concreto, Martín ha destacado el mes de septiembre como el periodo de más riesgo, donde se produce un mayor incremento de los contagios, ya que "muchos niños vienen con piojos del verano, de la playa, los campamentos y las piscinas", lugares donde "comparten toallas, peines o cepillos" facilitando la transmisión, por lo que "al llegar a clase infectan a los compañeros". "Al final están todos infectados e infectando a los hermanos, por lo que se multiplica todo", ha concretado.
Si bien el colegio no es necesariamente la fuente de los piojos, la experta ha recordado que es en el centro escolar "donde los niños pasan mayor tiempo a lo largo del día", por lo que "al haber 30 niños juntos en una clase, en cuanto lo tengan dos, el resto se infecta rápidamente".
Así, desde Head Cleaners han señalado la necesidad de ser cautelosos con esta cuestión, puesto que estos insectos "se reproducen muy rápidamente", y si bien no son portadores de enfermedades, "en casos muy graves lo que producen son heridas en la cabeza" que llegan a infectarse. "Un piojo hembra puede poner aproximadamente 10 huevos al día, que tardan en eclosionar una semana", por lo que "en 10 días puedes tener al niño lleno de piojos", ha dicho.
En esta línea, las medidas de precaución a tomar son "las de toda la vida", pasando de una revisión en profundidad de las cabezas, a tener en cuenta que "los niños con el pelo cortito lo cogen menos que aquellos con el pelo largo, y las niñas con el pelo recogido, menos que las que van con el pelo suelto". Sin embargo, Martín ha incidido en que a la hora de extraerlos, "hay que quitar el piojo y el huevo del piojo, la liendre", puesto que de no hacerlo, "dentro de una semana tenemos otra vez infección".
La experta ha enfatizado en la presencia de ciertos mitos respecto a estos molestos insectos, cuyo contagio "siempre es directo, no saltan ni vuelan", por lo que "en sitios donde hay una masificación infantil y los niños están muy juntos es mucho más fácil el contagio".