MADRID, 14 Feb. (EUROPA PRESS) -
Algunas personas con fibrilación auricular no tienen síntomas y no saben sobre su enfermedad hasta que se descubre durante una exploración física y la realización de un electrocardiograma (ECG), según alerta el cardiólogo especialista en arritmias, el doctor Joaquín Oscá, que añade que "la identificación precoz de la fibrilación auricular es fundamental para iniciar el tratamiento".
La fibrilación auricular es la arritmia cardíaca, o alteración del ritmo cardíaco, más frecuente que padece el ser humano. De hecho, según afirma Oscá, cardiólogo de Vithas Valencia 9 de Octubre y especialista en arritmias, "se estima que en España entre 1.000.000 y 2.000.000 de españoles padecen esta arritmia".
MULTIPLICA POR CINCO LA POSIBILIDAD DE SUFRIR UN ICTUS
En concreto, produce una frecuencia cardíaca acelerada e irregular y se asocia a un incremento del riesgo de muerte e insuficiencia cardíaca que afecta tanto a hombres como a mujeres, a un mayor riesgo de ictus, a un deterioro cognitivo y a un deterioro en la calidad de vida. De hecho,
según la Federación Española de Ictus, la fibrilación auricular no controlada multiplica por cinco el riesgo de sufrir un ictus.
Desde la Sociedad Europea de Cardiología, se recomienda la realización de campañas de detección de fibrilación auricular en personas con edad superior a 65 años con hipertensión arterial o diabetes mellitus; o en cualquier persona con edad superior a 75 años.
Así, según el especialista, las personas que tienen síntomas por la fibrilación auricular pueden experimentar lo siguiente: as personas que tienen síntomas por la fibrilación auricular pueden experimentar lo siguiente: palpitaciones, que son sensaciones de un latido del corazón acelerado, incómodo e irregular o un aleteo en el pecho; debilidad; menor capacidad para hacer ejercicio; fatiga; aturdimiento; mareos; dificultad para respirar y dolor en el pecho
Así, tal y como advierte Oscá, ante cualquier síntoma, la visita al cardiólogo es "ineludible". "La primera actuación será solicitar un electrocardiograma para determinar si los síntomas se relacionan con la fibrilación auricular u otro trastorno del ritmo cardíaco (arritmia)".
Otras pruebas diagnósticas, continúa, que completan la información del electrocardiograma son: holter, ecocardiograma, análisis de sangre, prueba de esfuerzo, además de radiografía de tórax