MADRID, 10 Ago. (EUROPA PRESS) -
Los investigadores de la Universidad de Vanderbilt, EE.UU, han realizado un estudio donde se demuestra que el consumo excesivo entre jóvenes del sexo masculino se asocia con un aumento de la presión arterial sistólica, que es la fuerza sobre los vasos sanguíneos cuando el corazón late.
Además, han puesto en relieve que "los atracones" frecuentes tenían efectos adicionales sobre el colesterol, en los hombres. En el caso de las mujeres se descubrió que tenían niveles de glucosa en sangre más altos que aquellas personas que no bebían.
De esta forma, los hallazgos concluyen que, en ambos casos, el consumo frecuente aumentaba las probabilidades de tener ciertos factores de riesgo cardiovascular, como presión arterial alta, colesterol y azúcar en sangre en edades tempranas.
"El riesgo se extiende más allá del bajo rendimiento escolar y un mayor riesgo de lesiones accidentales", ha declarado Mariann Piano, decana asociada de investigación de la Facultad de Enfermería de la Universidad de Vanderbilt.
El estudio, que encontró diferencias en cómo el consumo excesivo de alcohol afectana a hombres y mujeres jóvenes, ha señaldo que los jóvenes que admitieron que toman en exceso repetidas veces tuvieron una presión arterial sistólica y colesterol total más altos, mientras que las mujeres jóvenes tuvieron niveles más altos de azúcar en la sangre en comparación con los bebedores sin atracones.
Piano y sus coautores examinaron la presión arterial alta, el colesterol, el azúcar en la sangre y otros riesgos cardiovasculares en 4.710 adultos entre 18 y 45 años que respondieron a la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición 2011-2012 y 2013-2014. Los participantes fueron clasificados como no bebedores, bebedores compulsivos 12 veces o menos por año y bebedores compulsivos de alta frecuencia (más de 12 veces al año).
El 25,1 por ciento de los hombres y el 11,8 por ciento de las mujeres informaron consumo excesivo de alcohol en las altas frecuencias. El 29,0 por ciento de los hombres y el 25,1 por ciento de las mujeres informaron beber en exceso 12 veces al año o menos.