MADRID 16 Mar. (EUROPA PRESS) -
La pauta mensual de ácido zoledrónico, cada tres o cuatro semanas, durante 24 meses impacta positivamente en la supervivencia global de las pacientes con cáncer de mama metastásico, según se desprende de los resultados del estudio ZARAS, que se presenta, estos días en Suiza, en la XII Conferencia Internacional St. Gallen.
"Este resultado incide sobre la importancia que tiene cumplir las pautas establecidas de tratamiento de manera óptima, tanto en lo referente a la frecuencia de administración como en la duración del tratamiento, para la supervivencia global de las pacientes", afirma el especialista del Hospital Provincial de Córdoba, Juan de la Haba.
Dicho estudio es un análisis retrospectivo, observacional y multicéntrico en el que se evaluaron datos de 420 mujeres españolas con cáncer de mama metastásico ya fallecidas. En el segundo análisis intermedio se analizaron 161 casos, correspondientes a aquellas pacientes que habían recibido al menos tres dosis consecutivas de ácido zoledrónico y que tuvieron una supervivencia global mayor a 24 meses.
El 64 por ciento de las pacientes recibió más de doce dosis de ácido zoledrónico durante el primer año de tratamiento y el 39,8 por ciento durante el segundo año. Por otra parte, tan sólo 52 pacientes mantuvieron una frecuencia de administración óptima del tratamiento cada tres o cuatro semanas.
En palabras del experto, estudios como éste, realizado íntegramente en España y con aplicación en la práctica clínica diaria, demuestra que el nivel de la investigación clínica oncológica en el país es "muy bueno" y se debe, fundamentalmente, a la estructuración que se ha generado dentro de los grupos cooperativos.
De los cánceres de mama que se diagnostican, el 30 por ciento evoluciona a metástasis con el paso del tiempo, mientras que sólo un 5 por ciento de los cánceres de mama es metastásico en el momento del diagnóstico.
No obstante, en la actualidad, los expertos aseguran que los avances terapéuticos en torno a las enfermedades oncológicas están conllevando una disminución en la tasa de mortalidad asociada y una mejora de la calidad de vida.
"De hecho, es ya una realidad que las pacientes con cáncer de mama metastásico tienen una supervivencia similar a otras enfermedades que no son cáncer y en muchos de los casos dicha supervivencia va unida a una mayor calidad de vida", ha señalado Haba, durante su intervención en la conferencia.
"Así", prosigue, "a día de hoy el 50 por ciento de estas pacientes vivirá más años de los que establece la media de supervivencia para esta enfermedad, entre dos y cinco años".