PAMPLONA 31 Ago. (EUROPA PRESS) -
Una dieta mediterránea enriquecida bien con aceite de oliva virgen o con frutos secos puede revertir la arteriosclerosis en las arterias carotídeas en un solo año, según se ha demostrado en un ensayo realizado con 187 voluntarios en la Universidad de Navarra.
Los participantes, mayores de 55 años y con alto riesgo cardiovascular, se dividieron en tres grupos al azar. Dos de ellos recibieron instrucciones detalladas sobre cómo seguir de forma adecuada una dieta mediterránea, mediante entrevistas trimestrales con dietistas nutricionistas formadas para esta tarea y dirigidas por Ana Sánchez-Tainta, especialista en Nutrición Humana y Dietética en el centro académico.
Según ha explicado esta experta, a través de un comunicado, a continuación uno de los grupos que seguía un patrón de dieta mediterráneo recibía 15 litros de aceite de oliva virgen cada trimestre.
"Al otro", añade Ana Sánchez-Tainta, "se le facilitaban frutos secos para que los voluntarios consumieran 30 gramos al día de nueces, almendras y avellanas". Por último, al tercer grupo se le daban instrucciones y material para seguir una dieta baja en grasa.
A todos ellos se les midió el espesor de la capa íntima-media de la arteria carótida por ecografía, tanto al principio del estudio como al cabo de un año. "Entonces observamos que quienes tenían más engrosada esa capa -debido a la arteriosclerosis- mejoraban significativamente y había una regresión de las lesiones en el caso de las personas que habían seguido una dieta mediterránea enriquecida con aceite de oliva virgen o con frutos secos", ha destacado.
Este estudio PREDIMED-Navarra, publicado en la revista Atherosclerosis, ha sido dirigido desde el departamento de Medicina Preventiva de la Universidad de Navarra, con la colaboración del departamento de Neurología de la Clínica Universidad de Navarra, los servicios de Atención Primaria de Osasunbidea, el Hospital Clinic de Barcelona y el Instituto de la Grasa de Sevilla.
Sobre los resultados obtenidos, el director del proyecto y catedrático de Medicina Preventiva de la Universidad de Navarra, Miguel Ángel Martínez, ha sostenido que "una modificación de todo el patrón dietético es capaz de conseguir en un solo año unos resultados que no se alcanzan con los fármacos que se prescriben ni siquiera en dos años de tratamiento".
En este macroestudio nutricional, que se desarrolla desde el año 2003, participa la Universidad de Navarra junto con 19 centros de todo el país, y cuenta con la financiación del Instituto de Salud Carlos III de Madrid.