MADRID, 28 Nov. (EUROPA PRESS) -
Actualmente hay en España cerca de 250.000 personas con artritis reumatoide, de los que aproximadamente el 60 por ciento presenta sinovitis crónica, una inflamación de la membrana sinovial que, en los casos más avanzados, puede reducir la capacidad funcional y la calidad de vida de los pacientes.
Así se desprende de los datos publicados en el marco de la quinta edición de unas jornadas sobre este trastorno, organizadas en Barcelona por la Sociedad Española de Reumatología (SER) y UCB Pharma, en las que investigadores básicos y reumatólogos han intercambiado información sobre el tratamiento de esta dolencia.
Según ha recordado el doctor Juan Cañete, del Servicio de Reumatología del Hospital Clinic de Barcelona, en los pacientes con artritis que padecen sinovitis la membrana sinovial inflamada crece y "puede invadir el hueso y producir erosiones óseas o líquido sinovial que contiene células inflamatorias y enzimas que destruyen el colágeno, y otros productos inflamatorios, que pueden degradar el cartílago".
Por lo tanto, aboga por frenar su desarrollo para "minimizar la destrucción de la articulación", para lo que existe un "amplio arsenal de fármacos" entre los que se encuentran también los biológicos, que han permitido que un porcentaje significativo de pacientes haya entrado en remisión.
En este sentido, el profesor Mark H. Ginsberg, de la Universidad de California (Estados Unidos), ha expuesto los últimos conocimientos sobre la regulación de la función de las integrinas, unas moléculas de adhesión que juegan un papel muy importante en la formación embrionaria de tejidos, en la coagulación o en la acumulación de leucocitos en el foco inflamatorio.
Otros asuntos estudiados durante el encuentro han sido los aspectos biológicos que caracterizan a las células madres mesenquimales y su potencial utilización en el manejo de enfermedades inflamatorias de origen autoinmune; la utilidad de la IL-17 como diana terapéutica en la artritis reumatoide o los nuevos conceptos sobre autoinmunidad que abren nuevas oportunidades para la modulación del sistema inmune con objetivos terapéuticos, entre otros.