MADRID, 1 Feb. (EUROPA PRESS) -
El 50 por ciento de los pacientes oncológicos que presentan sarcopenia (pérdida de masa muscular) disminuyen o interrumpen sus tratamientos por la toxicidad, según ha revelado Nutricia, con motivo del Día Mundial contra el Cáncer (4 de febrero).
Los expertos han resaltado la elevada prevalencia de desnutrición y sarcopenia en el paciente oncológico y han observado que está presente en alrededor de un 40-50 por ciento de personas con cáncer recién diagnosticado, antes incluso de la aparición de pérdida de peso clínicamente aparente. Esta pérdida de masa muscular se asocia con el desarrollo de infecciones postoperatorias, la necesidad de rehabilitación, así como con una mayor incidencia, tanto de hospitalización, como de duración de la estancia hospitalaria.
En esta línea, Nutricia incide en que la desnutrición en pacientes oncológicos oscila entre el 30-70 por ciento, con
diferencias relacionadas con la edad del paciente, el tipo de cáncer y el estadio del mismo. Así pues, dependiendo del tipo de cáncer, la proporción de pacientes con pérdida de peso en el momento del diagnóstico oscila entre el 15-40 por ciento. Pacientes con cáncer en el tracto gastrointestinal, cabeza, cuello, hígado y pulmón son los que corren más riesgo de desnutrición.
"Tanto la sarcopenia como la caquexia van a condicionar la evolución del paciente oncológico, al estar relacionadas con la desnutrición. Esta aparece con frecuencia en estos pacientes, debido a su proceso oncológico y a los tratamientos recibidos como cirugía, radioterapia y/o quimioterapia. Esta desnutrición se asocia con un
exceso de morbilidad y mortalidad, mayor riesgo de complicaciones, prolongación de la estancia en el hospital, peores respuestas a los tratamientos coadyuvantes, así como una disminución en la calidad de vida", ha explicado el jefe Servicio Endocrinología y Nutrición Hospital Clínico Universitario de Valladolid y catedrático
de Endocrinología y Nutrición Universidad de Valladolid, Daniel de Luis.
La pérdida muscula, insiste Nutricia, se produce en todo tipo de pacientes, sea cual sea el índice de masa corporal (IMC). Los tratamientos para el cáncer pueden impactar sobre la composición
corporal. "Podemos observar una relación directa entre la situación nutricional deteriorada y algunos de los tratamientos utilizados para estos pacientes. Existe una peor respuesta a los tratamientos
adyuvantes en pacientes con desnutrición, con más complicaciones postoperatorias (fístulas, infecciones, estancia hospitalaria) y de tolerancia a quimioterapia y radioterapia", ha expuesto el doctor de Luis.
En los pacientes oncológicos con proceso de pérdida de masa muscular, la ingesta de proteínas se torna fundamental, así como un adecuada balanza de calorías y nutrientes esenciales, imprescindibles para ayudar al mantenimiento o ganancia de masa muscular. Según los expertos, la investigación futura debe integrar objetivos nutricionales que contemplen las necesidades fisiológicas de los individuos para prevenir o retrasar la sarcopenia.
En definitiva, ensalzan la importancia de un cribado nutricional continuo y de un apoyo nutricional a todos los pacientes en tratamiento. En este contexto, la terapia nutricional puede revertir las implicaciones de la sarcopenia y la obesidad sarcopénica en cáncer, mejorando su calidad de vida y facilitando una mejor tolerancia al tratamiento oncoespecífico. Los facultativos indican que la sarcopenia en el cáncer puede ser reversible, incluso
en las personas de mayor edad.