Los españoles también han afirmado que la COVID-19 tendrá un gran impacto en la salud mental, por detrás del empleo y la economía
MADRID, 26 Ene. (EUROPA PRESS) -
El 43 por ciento de los españoles ha reconocido que se siente emocionalmente mal o muy mal y un 36 por ciento afirma ser infelices, aunque en este caso, las mujeres superan a los hombres con un 21 por ciento frente a un 15 por ciento, según se desprende del segundo Estudio Internacional de Salud y Bienestar Mental del Grupo AXA que analiza la situación en España, Francia, Bélgica, Italia, Alemania, Reino Unido, Irlanda y Suiza.
El informe se ha presentado este miércoles y para la directora de Salud de AXA, Ángela Milla, quien ha sido la encargada de ofrecer los datos, estas cifras implican que "es un momento crítico para la salud mental" y ha considerado que se debe ser consciente de los efectos de esta pandemia. La encuesta se ha realizado a población de 18 a 75 años en cada país y se han aplicado cuotas al género, la edad, ocupación, región y tamaño del mercado.
Según los datos de la macroencuesta, España se sitúa en el medio de la clasificación en cuanto al bienestar mental, un sentimiento negativo que lideran los británicos (52%), seguidos de Irlanda (47%), Italia (46%) y ya se encuentra España con un 43 por ciento, igual que Bélgica y Alemania. Por el contrario, los ciudadanos suizos afirman sentirse mal o muy mal el 32 por ciento pero un 36 por ciento reconoce ser muy feliz.
Por género, en términos globales, los hombres son más felices, aunque se da una excepción en la franja de edad de 35 a 44 años, donde son las mujeres las que se sienten más pletóricas. Por países, sólo las belgas dicen ser más felices que sus compatriotas hombres mientras las mujeres italianas son las que registran un mayor porcentaje de infelices (27%). En España, el 48 por ciento de las mujeres se declara feliz y un 21 por ciento infeliz mientras en el caso de los hombres el 53 por ciento es feliz y sólo el 15 por ciento dice sentirse infeliz.
Asimismo, el 33 por ciento de los españoles ha reconocido haber tenido algún problema de salud mental en el pasado y, entre las problemáticas más frecuentes, el 20 por ciento de ellas se corresponde a la depresión, seguido de la ansiedad (14%). Para superar estas situaciones, la mitad de los españoles ha asegurado que ha recurrido a un amigo o familiar cercano, el mismo porcentaje que optó por las aficiones o pasatiempos.
"Para los españoles, la atención profesional y el apoyo de la red familiar son fundamentales para afrontar problemas como la depresión, la ansiedad o el estrés siendo, además, más conscientes de la necesidad de visibilizar estas cuestiones en el entorno familiar y social", ha desvelado Ángela Milla.
En este sentido, la experta ha destacado el alto porcentaje de españoles que recurre a la resiliencia o la positividad (40%) frente a la media europea del 34 por ciento. Además, un dato para la esperanza, a juicio de Ángela Milla, es que los españoles se sitúan a la cabeza de los países que consideran más importante hablar de salud mental con los hijos.
Así lo refrenda el 85 por ciento de los encuestados que ha reconocido estar de acuerdo en hablar a los menores sobre este problema. Una cifra que supera en cinco puntos la media europea.
Respecto a los diagnósticos, el estudio del Grupo AXA sitúa a España a la cabeza de los diagnósticos profesionales ya que el 53 por ciento de los españoles dicen haber sido diagnosticado por un psiquiatra o psicólogo (sólo superado por el 61% de los alemanes) así como un 29 por ciento cita a su médico generalista. Sólo el siete por ciento dice haber hecho un autodiagnóstico, un porcentaje
muy alejado del 22 por ciento de los irlandeses o el 18 por ciento de franceses que dicen haberse hecho un diagnóstico así mismo o haber buscado por internet.
Al respecto, el 66 por ciento de los encuestados españoles afirma haber conseguido superar sus problemas gracias a la ayuda profesional (46% con medicación y el 20% sin ella) mientras que el 20 por ciento dice haberlo hecho por sus propios medios. Sin embargo, el 38 por ciento de los españoles considera que el sistema público no ofrece el apoyo suficiente a las personas con problemas.
COVID-19 Y SALUD MENTAL
La encuesta también ha revelado que para los españoles, la salud mental es el tercer factor sobre el que la pandemia de la COVID-19 tendrá un mayor impacto, puesto que así lo ha considerado el 55 por ciento de los consultados. En primer lugar, los encuestados han contestado que la economía sufrirá un gran impacto (64%), por delante del empleo (59%).
Unas respuestas que han coincidido con la media europea, salvo en la salud mental, en la que los europeos, por lo general, creen que será el segundo factor con mayor impacto (49%), por delante del empleo (43%).
Un aspecto positivo que han recalcado los españoles, en relación a la pandemia, es que el 40 por ciento siente que están mejor preparados para afrontar grandes retos, lo que supone el mayor porcentaje de la muestra europea y siete puntos porcentuales más que la media.
De cara al futuro, los europeos han coincido en el mismo orden de prioridades de cara a los próximos doce meses. Los viajes, la vuelta a la rutina y la conexión familiar y con amigos han sido los tres aspectos que mas anhelan recuperar. En el caso de España, la voluntad de volver a socializar lleva al país a superar la
media europea, con un 48 por ciento frente al 47 por ciento de media, en todos los aspectos y destacar en actividades como volver a viajar(69%), tener una vida social activa (48%) y disfrutar de espectáculos culturales(37%).