MADRID, 25 Sep. (EUROPA PRESS) -
El 40 por ciento de los supervivientes de infarto no considera que su enfermedad sea crónica, y hasta un 56 por ciento siente más temor por otras patologías como el cáncer o el Alzheimer, según se desprende de una encuesta elaborado por Amgen a más de 3.200 supervivientes de infarto en todo el mundo.
El objetivo del trabajo ha sido conocer las percepciones y el conocimiento de los pacientes entorno a su enfermedad y a la relación que esta tiene con uno de sus principales factores de riesgo, el colesterol. Precisamente, aunque se calcula que el colesterol LDL se encuentra detrás del 60 por ciento de los infartos, el 44 por ciento de los supervivientes de infarto reconoce no medirse regularmente sus niveles y dos de cada diez pacientes afirma que nunca ha hablado con su médico sobre el papel del colesterol en la enfermedad cardiovascular.
"Los resultados de la encuesta parecen indicar que muchos pacientes no son conscientes de la gravedad de la enfermedad cardiovascular, y especialmente del papel que ejerce el colesterol elevado en ella. Es el caso de los supervivientes de infarto diagnosticados de colesterol elevado: solo uno de cada cinco considera sus niveles de colesterol como factor de riesgo de padecer un nuevo infarto", ha dicho el director médico de Amgen en España y Portugal, José Motellón.
En el caso de los pacientes españoles encuestados, aunque el 40 por ciento cree que va a sufrir otro evento cardiovascular, casi dos de cada diez afirman que su infarto previo no requiere de ningún tipo de tratamiento o de cambios en sus hábitos de vida.
"Es necesario seguir insistiendo en la importancia de la prevención y el correcto manejo de la enfermedad cardiovascular entre las personas que ya han sufrido un evento cardiovascular previo. El 40 por ciento de estos pacientes volverá a sufrir un nuevo evento cardiovascular antes de dos años3. Ofrecerles recursos para que tengan un control más activo en el tratamiento de su enfermedad es fundamental para frenar el impacto de la que sigue siendo la primera causa de muerte en el mundo", ha zanjado el doctor Motellón.