MADRID 2 Nov. (EUROPA PRESS) -
El ictus puede prevenirse, hasta en un 40 por ciento de los casos, si se practica ejercicio, se disminuye el consumo de alcohol y si se controla la presión arterial, según han explicado los expertos asistentes al Congreso Nacional que la Sociedad Española de Médicos de Atención Primaria (SEMERGEN) celebra en Oviedo desde este miércoles hasta este sábado. Tres de cada cuatro ictus se dan en personas mayores de 65 años.
A pesar de que existen factores de riesgo, como la edad, el sexo o la raza, que no se pueden modificar, existen otros como la hipertensión arterial, diabetes, el tabaquismo o sedentarismo, que sí se pueden cambiar.
"El ictus puede prevenirse hasta en un 40 por ciento de los casos mediante la adopción de sencillas medidas que afectan al estilo de vida, como el ejercicio regular, la disminución del consumo de sal y de alcohol, la adopción de la dieta mediterránea, el control de la presión arterial, dejar de fumar. En definitiva, la realización de actividades preventivas en sujetos sanos", ha argumentado el coordinador nacional del grupo de trabajo de ictus de SEMERGEN, el doctor Juan Carlos Martí Canales.
ATENCIÓN PRIMARIA
El experto ha considerado determinante realizar una verdadera prevención primaria. "Se calcula que si fuésemos capaces de realizar la mejor prevención primaria posible, estaríamos evitando un 43 por ciento de todos los ictus. Asumimos que el coste de una mala prevención primaria es igual al de la prevención secundaria en el ictus", ha destacado.
Sobre la figura del médico de atención primaria ha señalado que "debe colaborar en el proceso de sensibilización de la enfermedad" y ha subrayado el papel que desarrolla a la hora de tratar el ictus. "Le corresponde, pues, proceder al traslado en las mejores condiciones posibles y la responsabilidad de activar bajo ciertas condiciones el código ictus, que disparará una serie de medidas encaminadas a que la atención al individuo con un posible ictus sea lo más eficaz posible. También debe tener un conocimiento profundo de aquello que debe y no debe hacerse durante éste periodo", ha explicado.
Por otro lado, Martí Canales ha afirmado que el número de ictus va aumentar en España debido a la evolución demográfica. "Esto va a traducirse en un mayor esfuerzo económico devengado por las medidas de prevención y en una gran cantidad de sujetos en situación de dependencia, con el consiguiente coste económico y social", ha precisado.