MADRID 2 Nov. (EUROPA PRESS) -
El 33 por ciento de los españoles se plantea renunciar ir al dentista en los próximos meses por motivos económicos y la incertidumbre que causa la pandemia de coronavirus, según ha puesto de manifiesto un estudio llevado a cabo por la consultoría Key-Stone, con una muestra representativa de 1.000 familias españolas.
En concreto, los resultados del trabajo han mostrado que en estos últimos meses del año, y durante 2021, una de cada tres personas, con edades comprendidas entre los 20 y los 74 años (unos 12 millones de españoles), renunciará a tratamientos dentales por motivos económicos, a no ser que se trate de emergencias.
El porcentaje se eleva hasta el 54 por ciento para quienes han tenido o piensan tener una situación laboral y económica incierta a causa de la crisis sanitaria. "Esto podría acarrear graves consecuencias futuras para la salud bucodental y general", ha dicho el presidente de la Sociedad Española de Periodoncia (SEPA), Antonio Bujaldón.
Por su parte, el director de la investigación y presidente de Key-Stone, Roberto Rosso, ha recordado que las terapias odontológicas son "indispensables" para la población, tal y como ya se demostró en otro de los recientes estudios de la consultoría, donde se calculó que unos 10 millones de españoles habían tenido problemas en dientes y encías durante el confinamiento, de los cuales un 30 por ciento había empeorado sus condiciones de salud bucal por no haber podido acceder a la clínica dental.
"Abandonar tratamientos dentales en marcha, aplazarlos o no iniciarlos inmediatamente cuando están indicados, no solo agrava sus implicaciones para la salud oral presente, sino que complica su pronóstico e, incluso, termina siendo más costosos a medio-largo plazo", ha dicho el presidente de SEPA.
Además, según añade, dada la evidente vinculación que existe entre las enfermedades periodontales y otras patologías sistémicas, como la diabetes o algunas enfermedades cardiovasculares, descuidar la salud de la boca va a empeorar la salud general y la calidad de vida.
LA PANDEMIA PROVOCA LA MITAD DE LAS RENUNCIAS AL DENTISTA
Y es que, son al menos 6 millones los españoles adultos que relacionan con la pandemia su resistencia a optar por los tratamientos odontológicos pertinentes, el 33 por ciento como consecuencia del empeoramiento de la situación económica y un 16 por ciento por miedo al contagio.
El temor a contraer el virus se eleva entre quienes habían previsto acudir a realizar revisiones, mientras que las problemáticas económicas inciden de manera más notable, hasta el 70 por ciento, en intervenciones con un valor superior a los 1.500 euros.
Ahora bien, el miedo al contagio se reduce considerablemente, casi hasta la mitad, para aquellas personas que ya habían acudido al dentista tras el confinamiento, lo que indica que los nuevos protocolos de seguridad adoptados por las clínicas son bastante convincentes.
"Espero que el recrudecimiento de la pandemia no provoque un nuevo cierre de los centros odontológicos, que, por otra parte, han adoptado rígidos protocolos de seguridad para pacientes y empleados", ha añadido el presidente de Key-Stone.
HETEROGENEIDAD SEGÚN RENTA FAMILIAR
Por otro lado, el estudio ha subdividido la muestra en tres franjas de renta neta mensual por unidad familiar, lo que muestra diferencias estadísticamente significativas en el comportamiento de las personas entrevistadas.
Un 44 por ciento de las familias con una renta inferior a 1.500 euros piensa renunciar a tratamientos odontológicos, cifra que se reduce hasta el 24 por ciento cuando la renta supera los 3.000 euros. Pero es, sin duda, la pérdida del empleo o la incertidumbre económica añadida lo que determina la intención de renunciar a las visitas, por lo que un posible aumento en la gravedad de la crisis social, acompañado de un incremento en la desocupación, podría reducir el acceso a clínicas dentales en el futuro.
El estudio también revela que en las familias con hijos con edades comprendidas entre los 6 y los 19 años, se reduce la intención de renunciar a los tratamientos, que se sitúa en torno al 16 por ciento de los núcleos familiares.
Tanto si se trata de intervenciones más costosas, como por ejemplo la ortodoncia, como de revisiones o visitas rutinarias, los tratamientos dedicados a los hijos permanecen casi indemnes frente a la intención de renuncia.
Finalmente, la investigación ha revelado que el 21 por ciento de las familias declara serios problemas económicos: el 10 por ciento de familias entrevistadas afirma haber padecido un impacto muy negativo por la pérdida del empleo de uno o más de sus miembros, junto a un 11 por ciento que confirma estar viviendo una difícil situación motivada por un ERTE o inestabilidad laboral que irá en aumento, podría perdurar en el tiempo o agravarse posteriormente.
Otro 16 por ciento ha logrado resolver problemáticas relativas a la incertidumbre laboral y expedientes temporales de regulación de empleo, mientras que sólo el 63 por ciento de las familias permanece indemne a las problemáticas sobre seguridad laboral.
Por todo ello, a los problemas económicos y culturales que habitualmente retraen al ciudadano frente a la consulta dental, ahora se añaden las incertidumbres motivadas por la pandemia. "No debería infravalorarse el hecho de que la crisis económica, la incertidumbre laboral y el miedo al contagio contribuirán a borrar todavía más la sonrisa de los españoles en los próximos meses, que se anuncian nada prometedores", ha zanjado Rosso.