MADRID, 2 Ago. (EUROPA PRESS) -
Más del 30 por ciento de las personas que tienen algún familiar con una enfermedad aórtica torácica (TAD, por sus siglas en inglés) tienen una predisposición genética subyacente para desarrollar una patología aórtica, según un estudio llevado a cabo por expertos de la Universidad de Leicester (Reino Unido) y que ha sido publicado en el 'Journal of the American Heart Association'.
Por tanto, el trabajo, que ha sido parcialmente financiado por la British Heart Foundation, ha destacado la importancia de hacer pruebas de imagen y genéticas de rutina de los familiares de pacientes afectados por TAD para identificar las enfermedades de manera temprana.
Asimismo, la investigación también ha sugerido que las pautas actuales para la afección no pueden ser eficaces en pacientes que están potencialmente en riesgo, especialmente porque el cribado no se realiza rutinariamente en el Reino Unido.
"Nuestra investigación identifica importantes lagunas de conocimiento con respecto a la precisión predictiva de las pruebas de detección comúnmente utilizadas en pacientes con aorta torácica enfermedades", han señalado los expertos.
El estudio incluyó una combinación de pruebas genéticas y de imágenes, que incluyen un ecocardiograma, una tomografía computarizada y una resonancia magnética de la aorta. Todas estas pruebas podrían adoptarse "fácilmente" como herramientas simples y rápidas de detección de rutina para identificar a los familiares de pacientes con riesgo de enfermedades aórticas.
"Ahora que tenemos una mejor idea del porcentaje de familiares de personas con enfermedades aórticas que también es probable que sufran con esta afección, podemos comenzar a determinar la viabilidad financiera de la detección sistemática de rutina para este grupo de riesgo", han zanjado los expertos.