MADRID, 3 Nov. (EUROPA PRESS) -
El 14 por ciento de los niños menores de 5 años (más de 400.000) sufre algún episodio de diarrea al año en España, mientras 1.500 millones de personas en el mundo se ven afectadas por esta enfermedad, según ha apuntado la doctora Silvia Gómez Senent, médico especialista en aparato digestivo en la clínica HBN39.
Los virus son la principal causa de diarrea en niños, sobre todo el rotavirus, que es altamente contagioso en espacios cerrados como la guardería o el colegio. Sin embargo, también puede estar causada por otros patógenos como el norovirus, el adenovirus y el astrovirus.
En un estudio realizado en España se observó que, entre las bacterias causantes de este trastorno, el germen más habitual es el 'Campylobacter jejuni' (59,9 por ciento), seguido de 'Salmonella' (31,8 por ciento) y, a larga distancia, 'Aeromonas' (2,7 por ciento) y 'Yersini'a (2,5 por ciento).
Otras bacterias como 'Shigella' y 'Escherichia coli' son responsables cada una de ellas de menos del 1 por ciento de las gastroenteritis bacterianas.
"La diarrea es una patología muy frecuente en Atención Primaria y una causa frecuente de ingreso hospitalario, sobre todo en niños pequeños. En Europa su incidencia es de 0,5 - 2 episodios por niño y año en los menores de tres años", ha comentado la doctora Gómez Senent.
Algo que corrobora la doctora Elena Fernández Villalba, pediatra en el centro BMUM, quien añade que "en los países desarrollados la gastroenteritis aguda es una de las enfermedades más frecuentes junto con las respiratorias".
"Se trata de patologías que no son fáciles de tratar, ya que conllevan mucho coste emocional, familiar y económico, por lo que tenemos que entender que es necesario que se mejoren estos cuadros. Tenemos evidencia sobre el uso de probióticos y la mejoría de estos pacientes", ha resaltado.
Por ese motivo, los especialistas recomiendan el uso del probiótico 'Lactobacillus rhamnosus GG' (Bivos) para ayudar a reducir la gravedad y la duración de los episodios de gastroenteritis aguda y prevención de los casos de diarrea asociada a antibióticos en pacientes pediátricos, así como prevenir la deshidratación con suero oral o soluciones de rehidratación oral.
Los probióticos son microorganismos vivos que, cuando son administrados en cantidades adecuadas, confieren beneficios para la salud del huésped. De hecho, algunas cepas probióticas actúan ayudando a reducir la gravedad y la duración de la diarrea infecciosa aguda en niños.
"Bivos contiene una de las cepas que la ESPGHAN (European Society for Paediatric Gastroenterology Hepatology and Nutrition), en su grupo de trabajo de probióticos, la recomienda con un nivel de evidencia 1 para el tratamiento de la diarrea aguda en niños", ha explicado Gómez Senent.
La evidencia que existe con LLG demuestra la disminución de la duración de la diarrea y la mejoría de la consistencia de las heces. Además, en los casos de prevención de la diarrea aguda de niños secundaria al uso de antibióticos o de una diarrea nosocomial (contraídas en el hospital), la cepa 'Lactobacillus rhamnosus GG' tiene un nivel de evidencia 1 por el mismo grupo de trabajo.
En el sistema digestivo de la población pediátrica conviven millones de bacterias para que nuestro organismo funcione correctamente. Ese conjunto de bacterias "buenas" se llama flora intestinal y es fundamental que se mantenga en equilibrio para mantener un intestino saludable.
Sin embargo, tal y como señala la doctora Fernández Villalba, "tras una gastroenteritis aguda, la microbiota se ve alterada y la permeabilidad intestinal también".
Por ello, es necesario reforzarla para evitar que el niño vuelva a recaer o enferme con otro tipo de patologías. En este sentido, el probiótico Bivos, que incluye 'Lactobacillus rhamnosus GG' y no contiene mezcla de cepas, también puede usarse para restablecer el equilibrio intestinal y prevenir la disbiosis cuando se produce una alteración del equilibrio microbiológico intestinal.
Este producto es apto desde recién nacidos en su formato gotas. Este probiótico se presenta en un frasco de 8 ml y se recomienda no superar la cantidad máxima diaria recomendada de 9 gotas. Por otro lado, también tiene la opción en solución oral en sobres para los niños mayores de un año. Se presenta en un formato de 10 mini sobres de 1,5 gramos y se aconseja no superar la cantidad máxima recomendada de 2 sobres.
Bivos se puede tomar a cualquier hora del día, ya sea directamente o mezclado con comidas o bebidas. En estos casos, los expertos señalan que es importante explicar que debe administrarse con alimentos y bebidas no calientes para evitar que los microorganismos mueran.