La clave: sacan la sangre de la cavidad vaginal y mantienen un entorno ácido, que disuade de las infecciones
MADRID, 30 Jul. (EUROPA PRESS) -
Muchas niñas de países de ingresos bajos y medios tienen dificultades para comprar productos que les permitan controlar su menstruación, lo que puede hacer que falten a la escuela. Por eso es fundamental que tengan acceso a productos menstruales.
Un nuevo estudio realizado en Kenia por investigadores de la Universidad de Illinois Chicago (Estados Unidos) ha demostrado que los beneficios de la copa menstrual van mucho más allá del acceso a la educación.
Según el estudio, publicado en la revista científica 'PLOS Medicine', las adolescentes que usan copas menstruales tienen menos probabilidades de contraer ciertos tipos de infecciones vaginales y más probabilidades de tener un microbioma vaginal sano.
En la investigación, se hizo un seguimiento de 436 chicas keniatas de secundaria, la mitad de las cuales recibieron copas menstruales. Cada seis meses se les hicieron pruebas de vaginosis bacteriana, un tipo común de infección, y a los 12 y 30 meses de infecciones de transmisión sexual. Los investigadores también analizaron el microbioma vaginal de las participantes para determinar la prevalencia relativa de bacterias beneficiosas y perjudiciales.
Al final del estudio, las chicas con copas menstruales tenían un 26 por ciento menos de probabilidades de padecer vaginosis bacteriana y un 37 por ciento más de probabilidades de tener un microbioma vaginal óptimo que las chicas que no recibieron una copa.
En general, las copas menstruales no parecían reducir el riesgo de infecciones de transmisión sexual, pero cuando los investigadores controlaron los factores de confusión, como la edad y si las chicas eran sexualmente activas, sí observaron una disminución de las ITS entre las que usaban una copa menstrual.
"Los resultados mostraron que las copas menstruales podrían cambiar las reglas del juego y ayudar a las chicas a mantenerse sanas", ha explicado Supriya Mehta, investigadora principal del estudio.
Hay varias razones por las que las copas menstruales son más beneficiosas para la salud vaginal que otros productos menstruales, según Mehta.
La copa, que tiene forma de campana y está fabricada con silicona de calidad médica, se introduce en la vagina, donde recoge la sangre. Los tampones, en cambio, no sacan la sangre de la cavidad vaginal, y este entorno rico en hierro puede ser acogedor para las bacterias que causan la vaginosis bacteriana.
Las copas también son mejores que los tampones a la hora de mantener un entorno ácido, que disuade de las infecciones. En cuanto a las compresas o paños reutilizables que se llevan demasiado tiempo o no se limpian adecuadamente, pueden acabar transfiriendo bacterias a la vagina. "Todos estos son retos que abordan las copas menstruales", ha detallado Mehta.