MADRID, 20 Jun. (EUROPA PRESS) -
Las mujeres con mamas densas, es decir, mamas con una mayor proporción de tejido glandular en comparación con el tejido adiposo, constituyen una gran proporción de mujeres aptas para la prueba de detección.
El cáncer de mama puede ser difícil de detectar en mamografías de mamas densas debido a la similitud en la apariencia del tejido mamario denso y los crecimientos cancerosos. Ambos aparecen blancos en la imagen. Las mamas densas también se asocian con un mayor riesgo de cáncer de mama.
Además, lo que aumenta la complejidad del asunto es que dos mujeres con una densidad mamaria similar pueden tener diferencias sustanciales en sus patrones de tejido. Tener una mayor comprensión de los patrones y características distintivos del tejido mamario, más allá de la medición de la densidad mamaria, puede contribuir a mejorar las evaluaciones del riesgo de cáncer de mama.
En uno de los estudios más grandes de su tipo, investigadores de la Universidad de Columbia, la Universidad de California y de la Clínica Mayo de Rochester (Estados Unidos) han identificado seis patrones de textura mamaria que pueden estar asociados con un mayor riesgo de cáncer, según un nuevo estudio publicado en 'Radiology', la revista de la Sociedad Radiológica de Norteamérica (RSNA).
QUÉ MUJERES PODRÍAN BENEFICIARSE DE PRUEBAS COMPLEMENTARIAS
"Planteamos la hipótesis de que algunos patrones o fenotipos se asociarían con un alto riesgo de cáncer de mama en el futuro y sugerimos qué mujeres podrían beneficiarse de pruebas complementarias de detección o estrategias de prevención", detalla una de las autoras principales, la doctora Celine M. Vachon, profesora de epidemiología en la Clínica Mayo de Rochester, Minnesota.
"Otros fenotipos podrían asociarse con un bajo riesgo, lo que, en última instancia, sugeriría pruebas de detección menos frecuentes", añade.
Los investigadores utilizaron radiómica en las mamografías de más de 30.000 mujeres sin antecedentes de cáncer de mama de tres cohortes de cribado diferentes. La radiómica extrae grandes cantidades de características cuantitativas de las imágenes médicas para identificar patrones y características que podrían no ser visibles para el ojo humano.
De la gran muestra, los investigadores extrajeron 390 características radiómicas que se resumieron en seis fenotipos, que son características o rasgos cuantificables. Estos seis fenotipos se evaluaron posteriormente en mamografías de más de 3.500 mujeres, algunas de las cuales desarrollaron cáncer de mama y otras no. Los resultados mostraron que los fenotipos radiómicos estaban asociados con un mayor riesgo de cáncer de mama invasivo tanto en mujeres negras como blancas.
"Nos sorprendió descubrir que estos fenotipos radiómicos indicaban un mayor riesgo en mujeres negras que en mujeres blancas", incide la coautora principal, Despina Kontos, profesora de Ciencias Radiológicas Herbert y Florence Irving y directora de información de investigación del Centro Médico Irving de la Universidad de Columbia. "Esto es especialmente importante, ya que el cáncer de mama tiende a ser más agresivo en mujeres negras, lo que pone de relieve la necesidad de nuevos factores de riesgo en esta población".
MÁS ALLÁ DE LA MEDICIÓN DE LA DENSIDAD MAMARIA
Estos fenotipos también podrían predecir las probabilidades de que una mujer reciba una mamografía con resultado falso negativo (cuando no se detecta cáncer en una mamografía) o un diagnóstico de cáncer a intervalos (cáncer diagnosticado entre exámenes programados).
"Comprender quiénes corren mayor riesgo de padecer cáncer de mama invasivo, especialmente los tipos más agresivos, es crucial para prevenir el cáncer y diagnosticarlo de forma temprana para, potencialmente, elegir tratamientos menos intensivos", añade la coautora principal, la doctora Karla M. Kerlikowske, profesora de medicina, epidemiología y bioestadística en la Universidad de California en San Francisco.
Los autores describieron las aplicaciones futuras de estos fenotipos y cómo pueden complementar los modelos de riesgo de cáncer de mama existentes. "Nuestros próximos pasos incluyen extender nuestras investigaciones a grupos más grandes de mujeres en la población estadounidense, especialmente examinando mamografías 3D, y combinando estos factores de riesgo radiómicos con factores genéticos y otros factores de estilo de vida para mejorar nuestra capacidad de definir quién tiene (y quién no) mayor riesgo de cáncer de mama invasivo", finalizan las investigadoras.