MADRID, 9 Ago. (EUROPA PRESS) -
Para ayudar a las mujeres a conocer más sobre su ciclo menstrual, Intimina, compañía que ofrece dedicada a la salud íntima femenina, comparte 6 razones por las que la regla puede ser irregular. En este sentido, recuerdan que los retrasos en la regla no siempre son sinónimo de embarazo y pueden deberse a estrés, cambios en el peso o enfermedades crónicas.
El ciclo menstrual es un proceso cíclico, que se repite y que es individual. Por lo tanto, va a tener una intensidad y duración diferentes en cada cuerpo. La creencia habitual es que el ciclo debe durar 28 días, pero en muchos casos no es así. La duración "normal" del ciclo menstrual es de 21 a 35 días, si el ciclo dura menos de 21 días es lo que se conoce como "polimenorrea", y si es más largo y dura más de 35 días es lo que se denomina "oligomenorrea".
Es muy común que, en ocasiones, el periodo se retrase o se adelante, y en muchos casos, no es algo por lo haya que preocuparse. En caso de que el ciclo sea regular, lo que no quiere decir que dure 28 días, sino más bien, si se nota un patrón claro respecto a cambios en el cuerpo y en el ciclo, la persona podrá advertir cuándo se está produciendo alguna anomalía. Aunque podría tratarse de un embarazo, otras causas por las que la regla se podría retrasar son:
El estrés. Un estrés constante y crónico puede derivar en problemas de salud serios, incluyendo cambios en el ciclo. De hecho, durante los momentos de estrés, el equilibrio hormonal cambia y el ciclo puede volverse irregular. Además, hay que tener en cuenta que los picos muy intensos de estrés pueden producir también mayor cantidad de flujo o más dolor durante la menstruación.
El síndrome de ovario poliquístico. Entre otros síntomas, las mujeres con síndrome de ovario poliquístico suelen tener un crecimiento de vello excesivo (hirsutismo), quistes en los ovarios, aumento de peso y reglas irregulares con mayor frecuencia. Por ello, en caso de dudas, siempre es recomendable visitar a un ginecólogo, hacer los controles necesarios y recibir tratamiento si fuera oportuno.
La perimenopausia. Se trata de un periodo de cambio y suele darse alrededor de los 45 años. Se inicia antes de la menopausia (4 o 5 años antes) y dura unos 5 años una vez iniciada la menopausia. Esta época de la vida de las mujeres está marcada por unas reglas que se van retrasando cada vez más y más hasta que desaparece por completo (esto quiere decir que ya se ha entrado oficialmente en la menopausia).
El peso. Una pérdida o aumento de peso excesivo puede derivar en cambios hormonales, y por lo tanto en cambios en el ciclo. Lo más importante es mantenerse sana, con una dieta equilibrada, realizando ejercicio y entendiendo el cuerpo como un todo. Lo ideal es que estos cambios de peso se den a largo plazo y así ofrecer al cuerpo el tiempo necesario para acondicionarse.
La píldora. La píldora hace que el ciclo sea puntual, pero a veces, cuando se deja y luego se vuelve a tomar, se produce en el cuerpo un desajuste hormonal que puede derivar en periodos irregulares. Aunque esto suele ser motivo de angustia, es muy importante darle tiempo al cuerpo para adaptarse al nuevo ajuste hormonal.
Enfermedades crónicas. Algunas enfermedades crónicas pueden derivar en reglas irregulares y retrasos. En muchas de estas afecciones, como la diabetes, los problemas de tiroides o de intestino, se producen inflamaciones en el cuerpo que derivan en desequilibrios hormonales e irregularidades en el ciclo. En caso de sufrir alguna de estas enfermedades, se recomienda acudir al médico y realizarse chequeos regularmente.