MADRID, 21 Ago. (EUROPA PRESS) -
La mayoría de los casos la incontinencia urinaria pueden solucionarse mediante rehabilitación del suelo pélvico, que incluye la realización de ejercicios perineales, abdominales y posturales, junto con técnicas fisioterápicas como la electroestimulación, 'biofeedback', radiofrecuencia, ondas de choque o láser, según ha explicado la fisioterapeuta especializada en uro-ginecología, responsable de rehabilitación de suelo-pélvico en Policlínica Gipuzkoa, y vicepresidenta de la Sociedad Española de Pelvi-Perineología, Sara Esparza.
"En otras ocasiones, los tratamientos médicos son los más indicados, desde los farmacológicos a los quirúrgicos u otros", ha añadido la experta, quien ha asegurado que se puede tratar con éxito en más de un 80 por ciento de casos con técnicas de rehabilitación.
"La incontinencia urinaria se define como la pérdida involuntaria de orina y genera un problema social e higiénico al que la padece. Afecta mayoritariamente a mujeres y se estima que el 30 por ciento de las mujeres de edades comprendidas entre los 18 y los 55 años sufren pérdidas de orina", ha informado Esparza.
En este sentido, la experta ha defendido la importancia de mantener un buen tono muscular del suelo pélvico para prevenir infecciones, incontinencias y disfrutar de unas relaciones sexuales satisfactorias con el paso de los años y argumenta los beneficios de la rehabilitación de suelo pélvico para ello.
"En el caso de los hombres, es diferente y sólo un diez por ciento padece incontinencia urinaria. Aunque a partir de los 65 años afecta a un veinte por ciento y a partir de los 85 años a un 50 por ciento de los hombres. Siendo especialmente habitual tras cirugías de próstata", añade Esparza.
Según explica la fisioterapeuta experta en uro-ginecología, "es habitual ver que se dé una Incontinencia Urinaria de Esfuerzo (IUE) cuando las pérdidas de orina se producen al realizar un esfuerzo como un estornudo, tos, saltos o correr, y, en algunos casos, incluso al caminar".
"También solemos ver casos habituales de Incontinencia Urinaria de Urgencia (IUU), cuando el deseo de orinar aparece de forma brusca y el sujeto tiene dificultades para aguantar la orina y tiene que orinar con mucha frecuencia", ha resaltado.
Además, según ha indicado, pueden darse casos de Incontinencia Urinaria Mixta, cuando se dan tanto pérdidas al hacer esfuerzo como por urgencia.
La experta ha señalado que las pérdidas de orina al hacer esfuerzos se deben en el 90 por ciento de los casos a un descenso exagerado de la pared posterior de la uretra en el esfuerzo, causado casi siempre por una hipotonía de los músculos del suelo pélvico y, en ocasiones, por un déficit del cierre de la uretra.
"En aquellos casos en los que el sujeto describe síntomas de urgencia miccional, aumento de la frecuencia miccional, imperiosidad, el sujeto sufre de una hiperactividad colinérgica ... y las causas pueden ser muy diversas y van desde una infección urinaria, a un prostatismo, una hipotonía del suelo pélvico, una hipertonía de ciertos músculos pélvicos (prepubiano, obturador interno), una hipertonía vesical, o incluso un mioma uterino", ha detallado Sara Esparza.
¿CÓMO PREVENIR LA INCONTINENCIA URINARIA?
Para Sara Esparza, "el debilitamiento de los músculos del suelo pélvico y del abdomen son una de las causas principales de la incontinencia", de ahí que proponga "hacer ejercicios de tonificación abdomino perineal" como método de prevención. "Así, las técnicas hipopresivas se han demostrado una herramienta eficaz en la prevención de este incómodo síntoma".
Hacer una buena preparación al parto, una buena recuperación postparto, así como evitar factores que aumenten mucho la presión abdominal, tales como los esfuerzos repetidos, los deportes de impacto, los esfuerzos defecatorios, son un modo eficaz de prevenir la incontinencia urinaria y los descensos de órganos en opinión de esta experta.
CONSEJOS PARA MANTENER A RAYA LA INCONTINENCIA URINARIA
Algunas de las recomendaciones de Esparza para evitar la incontinencia urinaria se basan en evitar los esfuerzos abdominales repetidos (coger peso, esfuerzos defecatorios, toses repetidas) y si se hace un esfuerzo puntual, se debe contraer el periné y el abdomen previamente y durante el esfuerzo.
Además, evitar el deporte de impacto, como saltos, carreras y abdominales clásicos. También se aconseja realizar ejercicios de contracción perineal, corregir la postura e incluir ejercicios hipopresivos en la actividad física.
Beber 1,5 litros de agua al día, orinar correctamente cada 3 horas y evitar el alcohol y las bebidas excitantes son otras de las recomendaciones.