MADRID, 13 Nov. (EUROPA PRESS) -
La participación de la mujer durante las mamografías puede disminuir la sensación de dolor, como así lo está evidenciando un estudio clínico prospectivo aleatorizado que se está desarrollando en el Hospital del Mar de Barcelona con el sistema de mamografía de 'GE Healthcare', y cuyas conclusiones preliminares se han presentado en el IV Congreso Español de la Mama, que ha tenido lugar en octubre en Madrid.
Hasta la fecha, el estudio ha analizado 274 pacientes y espera llegar hasta las 500. La principal ventaja de este sistema es que permite a la mujer participar en el proceso, lo que le genera una mejor experiencia durante la realización de la prueba y la sensación de controlar la situación.
"El hecho de que la paciente intervenga en la prueba disminuye la sensación de dolor y la hace más consciente de su responsabilidad en la prevención del cáncer de mama. Este sistema consigue una mayor compresión, un menor dolor, no conlleva efectos adversos y aporta la misma calidad diagnóstica que en la mamografía convencional", ha explicado la radióloga Ana Rodríguez Arana.
En concreto, según el trabajo, el 64,9 por ciento de las pacientes prefiere la mamografía con compresión asistida; el 52,9 por ciento cree que este sistema es menos doloroso que el modo estándar; el 54,4 por ciento considera que estaría más cómoda en su próxima revisión si se realizara con compresión asistida; y el 70,4 por ciento recomendaría el sistema a familiares y amigas.
Asimismo, tras analizar 1.096 imágenes mamográficas realizadas con compresión asistida, considerando el grosor, fuerza de compresión y dosis glandular media, se ha concluido que no existen diferencias significativas de calidad con respecto a las mamografías convencionales.
Ahora bien, la experta ha avisado de que para garantizar la efectividad de la prueba, es imprescindible que el profesional realice la primera compresión, permitiendo que la mujer ajuste la segunda, a través de un mando que incorpora el sistema.
En España, el sistema de compresión asistida está disponible, entre otros centros académicos, en el Hospital del Mar de Barcelona, el Hospital Clínico San Carlos de Madrid y el Hospital Clínico Universitario de Valladolid.