MADRID 29 Nov. (EUROPA PRESS) -
Las mujeres viven más años pero con peor salud que los hombres, lo que provoca un gasto anual al Estado de 8.945 millones de euros al año, el 0,8 por ciento del PIB y el 70 por ciento de la factura farmacéutica, según se desprende del estudio de la plataforma 'ClosinGap' titulado 'Coste de oportunidad de la brecha de género en salud', elaborado por Afi y liderado por la compañía Merck.
"La salud determina el estado de bienestar de las personas y genera costes al sistema. Teniendo en cuenta que se calcula que se tardarán unos 170 años en acabar con la brecha de género en España es urgente que aceleremos el ritmo que llevamos para acabar con estas desigualdades", ha aseverado la presidenta y directora general de Merck en España y presidenta de 'ClosinGap', Marieta Jiménez, durante la presentación del trabajo.
Asimismo, las mujeres dedican 1.800 millones de horas al año al cuidado de personas mayores y enfermos crónicos, una dedicación que no es profesional y que, según los cálculos establecidos en el estudio, equivaldría a más de 977.000 empleos anuales a jornada completa, teniendo en cuenta que el Estatuto de los Trabajadores establece que la jornada laboral máxima legal en España es de 1.826 horas anuales.
Todo ello, tiene también implicaciones en la salud, puesto que se ha visto que estos cuidados incrementan en 3,4 puntos la probabilidad de que las mujeres sufran depresión y en 2,7 puntos ansiedad. Si se tiene en cuenta el valor económico potencial de esta mayor dedicación al cuidado que llevan a cabo las mujeres, se calcula que ronda entorno a los 7.812 millones de euros al año, cantidad con la que "podría pagarse el 85 por ciento de la nómica mensual de todas las pensiones contributivas al año".
Además, según ha añadido el socio de Afi, Diego Vizcaíno Delgado, la incidencia de la depresión y ansiedad en el PIB debido a que por estas causas las mujeres suelen tener más bajas por incapacidad temporal, respecto a los hombres, supone 345 millones de euros.
LA BAJA NATALIDAD LE RESTÓ 31.003 MILLONES DE EUROS A LA ECONOMÍA ESPAÑOLA
Otro de los datos analizados en el informe ha sido el impacto que está teniendo la natalidad española en la economía española, observándose que si España hubiera mantenido un comportamiento similar a la media de países del entorno habían nacido más de un millón de personas más en el año 1985, lo que significaría que en el año 2016 había 900.000 personas más en edad de trabajar.
Esta situación, tal y como ha explicado la directora de Corporate Affairs de Merck, Ana Polanco, ha provocado que la economía española recibiera 31.003 millones de euros menos en el año 2016, lo que equivale a casi el 50 por ciento del gasto público anual en sanidad en España, del cual el 9,3 por ciento habría formado parte de la recaudación por cotizaciones de Seguridad Social y representaría 2.872 millones de euros más en recaudaciones.
De hecho, el estudio ha evidenciado que aquellos países con una mejor evolución de la natalidad y con permisos de paternidad más prolongados, como Alemania, Reino Unido o Suecia, obtienen una mayor puntación en el Índice Global de Brecha de Género del Foro Económico Mundial, mientras que aquellos con peores cifras de nacimiento, como Grecia o Italia, obtienen peores puntuaciones.
Finalmente, Polanco ha informado de que en el trabajo se ha realizado un análisis cualitativo de los problemas de salud y patologías registrados por hombres y mujeres, fundamentalmente causados por factores biológicos pero, también, asociados a condiciones sociales como, por ejemplo, los diferentes hábitos de vida, la ocupación profesional desarrollada y los sesgos inconscientes de género.
Así, aunque no se han detectado diferencias entre ambos sexos con respecto al acceso y uso de los servicios del sistema sanitario, sí se ha observado importantes divergencias en la prevalencia de enfermedades. En concreto, las mujeres suelen padecer más problemas del aparato locomotor, sistema nervioso y trastornos del estado de ánimo, mientras que los hombres presentan una mayor incidencia en enfermedades del aparato respiratorio, cardiovascular y cáncer.
Sin embargo, si se atiende a la mortalidad, los datos han reflejado que los hombre suelen fallecer más por cáncer, enfermedades crónicas de las vías respiratorias inferiores o cirrosis, y las mujeres por trastornos mentales seniles y preseniles, Alzheimer y por causas relacionadas con patologías hipertensivas. Además, las patologías cardiovasculares provocan más la muerte a las mujeres que a los hombres, aunque a ellos se les diagnostique más.
Esto último se puede explicar, según ha argumentado Polanco, por el hecho de que los síntomas de infarto agudo de miocardio en la mujer son menos conocidos, lo que podría conducir a una menor autopercepción del riesgo y a que sean menos diagnosticadas.