Se ha encargado un estudio sobre las inundaciones de julio en la T4 y se valorará si repercutir el coste de los arreglos a las constructoras
MADRID, 26 Ago. (EUROPA PRESS) -
El 'nuevo' aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas priorizará la atención a las familias para facilitar su experiencia de paso por las instalaciones, lo que incluye la creación de cuartos de baño con salas de lactancia y nuevas zonas infantiles junto a los controles de seguridad, entre otras medidas incluidas en el 'Plan Barajas 100'
En una entrevista con Europa Press, la directora del aeropuerto, Elena Mayoral, explica que la intención de este plan es evaluar de manera continua las necesidades de mejora de las instalaciones, de modo que al primer centenar de propuestas, que deberían estar concluidas como máximo a finales de 2015, le sigan "otras cien ideas nuevas que llevar a cabo".
Entre otras cosas, la intención de los gestores de Barajas es remodelar todos los cuartos de baño de las cuatro terminales, "no sólo para renovar acabados ya degradados u obsoletos, sino para buscar un nuevo concepto" que incluya un espacio "exclusivamente reservado" para las familias, con sala de lactancia.
Además, se potenciará el sistema gratuito de sillar portabebés en la zona de embarque y se instalarán nuevas zonas infantiles "customizadas para que sean divertidas y cómodas" en los espacios que hay antes y después de los arcos de seguridad de los controles reservados para familias con niños y personas de movilidad reducida que ya se han habilitado.
De hecho, también las personas con dificultades de movilidad serán objeto de una atención especial en el 'Plan Barajas 100', que incluye "planes de formación más exhaustivos" para los trabajadores que atienden a estos viajeros y una renovación del parque de sillas y mobiliario a su disposición. "Incluso cambiaremos las zonas de atención a estas personas, creando salones más agradables y confortables en las zonas donde esperan a ser embarcados en el avión", insiste Mayoral.
CONTROLES "CON CORTESÍA"
La directora de Barajas hace también hincapié en la "excelencia" que se quiere conseguir en la atención a los pasajeros a la hora de pasar los filtros de seguridad. "Queremos que los controles sean lo más ágiles posible, que los pasajeros no piensen en ello. Las medidas son las que son, porque son normativa europea, pero se trata de hacerlo lo más agradable posible", señala.
Por eso, se está trabajando en cambios en las infraestructuras, como la instalación de pantallas donde se informe sobre el tiempo de espera para pasar el control o de plataformas de unión al mismo nivel entre las mesas de rodillo y los escáneres, de modo que los viajeros no tengan que cargar con su equipaje de mano sino que puedan arrastrarlo una vez esté colocado en las bandejas.
Pero también se trata de promover mejores procesos de control y un cambio de mentalidad entre los trabajadores de las concesionarias que atienden estos filtros, con el objetivo de que "se dirijan a los pasajeros de la forma más agradable y cortés posible".
De hecho, los viajeros pueden aportar voluntariamente su grado de satisfacción con la atención recibida a través de unos dispositivos instalados tras los arcos de seguridad de la Terminal 4 que funcionan mediante un sistema de colores que van del rojo al verde y de caritas más o menos sonrientes.
EMBELLECER LAS INSTALACIONES
Otro de los ámbitos de acción es el relativo al embellecimiento y remodelación de las instalaciones aeroportuarias tanto interiores como exteriores, lo que pasa por renovar la pintura, modernizar los parámetros y cambiar los suelos.
En este sentido, Mayoral asegura que "en ningún momento se trata de grandes inversiones, sino obras a pequeña escala" que, además, irán seguidas de nuevos procedimientos de detección de desperfectos para poder arreglarlos de manera ágil y rápida.
De hecho, parte de las obras de renovación de los aseos y del cambio de solado ya se ha licitado, y en principio la intención de los responsables de Barajas es que cambiar el suelo de las cuatro terminales no cueste más de un millón de euros. "Tras las restricciones presupuestarias, ahora queremos hacer labores preventivas con el mismo presupuesto para dar otra sensación del aeropuerto", apostilla su directora.
También se trabajará en la mejora de la señalización obsoleta o en mal estado, y en la colocación de nuevos indicadores allí donde se detecten puntos negros, tanto dentro como en los viales y bifurcaciones en torno al aeropuerto. "Cuando mucha gente pregunta por lo mismo en el mismo sitio quiere decir que existe algún problema", reflexiona Mayoral.
Este tipo de intervenciones están pensadas fundamentalmente para algunas zonas prioritarias por ser las de mayor tránsito, si bien la intención de la Dirección de Barajas es actuar en todo el aeropuerto, incluyendo el 'back office', es decir, las oficinas, los almacenes, los vestuarios y el resto de dependencias reservadas al personal.
ESPACIO COMERCIAL Y OTROS SERVICIOS
Estos planes se completan con la remodelación comercial que Barajas lleva experimentando desde hace meses y que incluirá, en un futuro no muy lejano, tanto una clínica médica como un centro spa, cuya primera ubicación estará, previsiblemente, en la Terminal Satélite, la zona donde las esperas en tránsito son más largas, lo que permitirá a los responsables del aeropuerto analizar el éxito de esta oferta para, eventualmente, "extenderla al resto de terminales del aeropuerto".
"La idea es empezar allí y, si funciona bien y la gente responde, extenderlo al resto de terminales para que, se entre por donde se entre en el aeropuerto, el viajero tenga acceso a los mismos servicios", explica Mayoral, apuntando que aún se está preparando el proyecto de licitación de estas instalaciones.
Lo que sí se ha abordado ya es la ampliación de la zona comercial que, tras la remodelación completa --que concluirá este mismo trimestre--, sumará más de 41.600 metros cuadrados entre 50 restaurantes de las franquicias más reconocidas y un centenar de tiendas, incluyendo uno de los mayores 'duty free' pasantes del continente.
Entre todos estos espacios se han creado además "acogedoras plazas comerciales" donde los pasajeros pueden relajarse mientras esperan su vuelo, navegar por Internet o consultar los contenidos que se les ofrecen en unas pantallas gigantes o en los espacios 'MAD Fashion Hub', donde estarán instaladas algunas de las principales marcas de moda y complementos.
CAMBIO DE MENTALIDAD
No obstante, una de las patas principales de todo este 'Plan Barajas 100' es conseguir un "cambio de mentalidad" en los trabajadores y proveedores, de modo que el proyecto "sea sostenible en el tiempo" y no se limite a una intervención puntual. "El aeropuerto es nuestra casa, así que ésta es tarea de todos, tenemos que involucrarnos todos", subraya Mayoral.
En este sentido, se ha habilitado un correo electrónico donde comunicar incidencias y se fomentará la comunicación permanente y los flujos de información y partes de incidencias.
Además, se implicará a los empleados en el mantenimiento de la limpieza en todos los puntos del aeropuerto y se seguirá una estricta política de tolerancia cero con los folios como elementos de señalización, el desorden, las pintadas o pegatinas, o los acopios no autorizados y la maquinaria en zonas públicas. También se recurrirá al uso de vinilos para ocultar defectos estéticos.
Finalmente, preguntada sobre las fuertes granizadas ocurridas en Madrid a principios de julio y que causaron algunos problemas de inundaciones en la Terminal 4, Mayoral ha explicado que "se ha encargado un estudio independiente para conocer el origen de la situación y las medidas que hay que tomar", y ha asegurado que una vez se tenga esa información se decidirá si es conveniente repercutir eventuales costes de reparación a las empresas constructoras de la terminal.