MADRID, 17 Nov. (EUROPA PRESS) -
Cada año, miles de mujeres jóvenes reciben un diagnóstico de cáncer que cambia su vida de golpe. Más allá de la lucha por la supervivencia, muchas se enfrentan a otra preocupación que pocos mencionan: la fertilidad. La quimioterapia y la radioterapia, tratamientos que salvan vidas, pueden dañar los ovarios y reducir drásticamente la posibilidad de tener hijos en el futuro.
PRESERVACIÓN DE ÓVULOS Y TEJIDO OVÁRICO: ESPERANZA PARA FUTURAS MADRES
Por eso, cada vez más pacientes exploran opciones como la preservación de óvulos o tejido ovárico, buscando mantener abiertas sus posibilidades de maternidad sin comprometer su tratamiento contra el cáncer.
Un artículo clínico describe la preservación exitosa de tejido ovárico en una mujer joven sometida a quimioterapia urgente y demuestra un modelo de atención innovador para Canadá, según expertos de la Universidad de Toronto (Canadá).
UN CASO CLÍNICO QUE DEMUESTRA INNOVACIÓN EN ONCOFERTILIDAD
Publicado en la 'CMAJ' (Canadian Medical Association Journal) este artículo recuerda que, en pacientes en edad reproductiva con cáncer, la preservación de la fertilidad para la posibilidad de tener hijos en el futuro debe ser una prioridad.
"Este caso ilustra los complejos desafíos que enfrentan los pacientes jóvenes con cáncer que desean tener hijos biológicos, pero que requieren un tratamiento urgente que amenaza su capacidad reproductiva", escribe la doctora Jennia Michaeli, especialista en fertilidad del Hospital Mount Sinai, perteneciente a Sinai Health, e investigadora clínica y profesora adjunta de la Universidad de Toronto, Ontario, junto con otros coautores. "Desafortunadamente, muchas intervenciones que salvan vidas -como la cirugía de órganos reproductivos, la quimioterapia y la radioterapia abdominopélvica- aumentan el riesgo de infertilidad y disfunción endocrina reproductiva".
La paciente, residente a 380 km de Toronto, decidió someterse a la preservación de tejido ovárico tras recibir asesoramiento sobre las opciones disponibles, los riesgos de la cirugía y los pasos del procedimiento. El equipo de fertilidad del Hospital Mount Sinai de Toronto coordinó la atención a distancia con el oncólogo y el ginecólogo locales de la paciente para garantizar que el tejido se extrajera quirúrgicamente y se transportara, bajo control continuo de temperatura, a un laboratorio de embriología especializado en Mount Sinai.
A pesar de que las directrices canadienses respaldan la preservación de la fertilidad como un estándar de atención para pacientes con cáncer, la angustia de los pacientes en torno a la supervivencia, la falta de conocimiento de los médicos sobre las opciones y la capacidad limitada del sistema representan barreras para una adopción más amplia de esta práctica.
MEJORANDO LA CALIDAD DE VIDA DE PACIENTES JÓVENES CON CÁNCER
El caso de esta paciente demuestra que la implementación de un modelo centralizado de "centro y periferia" podría ayudar a abrir las puertas a la criopreservación de tejido ovárico para pacientes jóvenes con cáncer en todo Canadá. "Hemos prestado con éxito servicios especializados de oncofertilidad a través de vías de atención coordinadas que superan las barreras geográficas, lo que sirve como prueba de concepto", escriben los autores.
"El modelo descrito tiene como objetivo reducir la infertilidad y la disfunción endocrina reproductiva, minimizar el impacto psicosocial de la infertilidad y mejorar la calidad de vida de los pacientes y sus familias mediante la mejora del acceso y la coordinación de la atención médica", concluye.