MADRID, 11 May. (EUROPA PRESS) -
Investigadores de la Universidad de Basilea (Suiza) han descubierto un enfoque contra el cáncer de mama que consiste en una combinación tóxica con un segundo gen objetivo para acabar con las células anormales.
Un diagnóstico de cáncer de mama es el comienzo de un largo camino de tratamientos. Las afectadas se enfrentan pronto al hecho de que no todos los tipos de cáncer de mama son iguales.
La terapia depende en gran medida de las características del tejido tumoral, como la presencia de determinados receptores hormonales y los defectos de las células anormales.
Los tumores de mama con receptores de estrógeno positivos constituyen un grupo que suele tratarse con terapias hormonales, pero que con frecuencia se vuelve resistente a dichos tratamientos con el paso del tiempo. Algunos tumores de mama con determinadas alteraciones genéticas son difíciles de tratar con las terapias existentes.
En su trabajo, publicado en la revista científica 'Communications Biology', estos investigadores suizos han descubierto un enfoque terapéutico prometedor para este subconjunto de tumores de mama con receptores de estrógeno positivos.
El enfoque se basa en que el defecto genético de estas células cancerosas (una mutación en el gen GATA3) las hace sensibles a la desactivación de un segundo gen llamado MDM2. Las células sanas no sufren daños cuando se inhibe MDM2. Sin embargo, en las células de cáncer de mama con el defecto GATA3, la pérdida de MDM2 provoca la muerte de las células.
El hecho de que MDM2 podría ser una estructura objetivo interesante para el tratamiento de estos tumores de mama fue revelado por un algoritmo computacional desarrollado por el profesor Niko Beerenwinkel de la ETH de Zúrich en colaboración con investigadores de la Universidad de Basilea.
Este algoritmo predice pares de genes cuya pérdida hace poco daño por separado pero en combinación es letal para las células, y el programa propuso a MDM2 como segundo componente junto a GATA3. "Los inhibidores de MDM2 ya existen y se están utilizando o probando en ensayos clínicos para otros tipos de cáncer", explica uno de los responsables de la investigación, Salvatore Piscuoglio.
En varios experimentos con minitumores en una placa de Petri y con tejido de cáncer de mama humano en animales de laboratorio, por ejemplo, se demostró que los inhibidores de MDM2 reducían los tumores. Los investigadores han solicitado la patente de su método y ahora esperan que la terapia pueda probarse pronto también en el ámbito clínico.
"Los inhibidores de MDM2 ya han sido aprobados en EE.UU. para el tratamiento de ciertos tipos de cáncer", dice Piscuoglio, y añade que esto facilita el cambio para su uso en el cáncer de mama.