MADRID, 7 Oct. (EUROPA PRESS) -
Investigadores de la Universidad de Notre Dame (Francia) han identificado, en un estudio publicado recientemente en la revista 'Nature Communications', un par de proteínas que se consideran críticas para la metástasis del cáncer de mama a los huesos.
Los expertos han descubierto que la proteína CXCL5 es clave para señalar el crecimiento de las células cancerosas una vez que se une a su receptor CXCR2. En este sentido, el trabajo ha puesto de manifiesto que estas dos proteínas provocan que las células de cáncer de mama, incluidas las que permanecen inactivas, se reproduzcan y se propaguen rápidamente a los huesos y a la médula.
"Estos tumores en los huesos del cáncer de mama son como una enfermedad nueva, diferente al tumor original y, por lo tanto, presentan sus propios desafíos. De hecho, alrededor del 73 por ciento de las mujeres que mueren de cáncer de seno tienen metástasis óseas", han dicho los expertos.
Asimismo, los investigadores han identificado los factores que pueden activar la proliferación del cáncer de mama o inhibirla, así como inducir la latencia de las células cancerosas en el hueso. En concreto, la proteína CXCL5 se identificó como un factor proliferativo, si bien anteriormente su receptor CXCR2 se había relacionado con malas respuestas a los tratamientos de quimioterapia.
Por lo tanto, los investigadores analizaron cómo CXCL5 y CXCR2 pueden trabajar juntos para aumentar la proliferación de células cancerosas. El equipo descubrió que cuando se bloqueaba el receptor CXCR2 se inhibía la señalización inducida por CXCL5, evitando la rápida proliferación de células de cáncer de mama en los huesos.
"Antes de nuestro estudio, no se había explorado la idea de que CXCL5 y CXCR2 desempeñaban un papel esencial en este paso crítico en la colonización ósea por cáncer de mama. Ahora tenemos la oportunidad de analizar cómo inhibir este proceso celular podría ser un objetivo para futuras terapias para tratar la metástasis del cáncer de mama u otros tipos de cáncer que se extienden a los huesos", han zanjado los expertos, quienes han confirmado que CXCL5 y CXCR2 estaban presentes en una muestra de hueso humano de un paciente con cáncer de mama con metástasis en los huesos.