MADRID, 25 Nov. (EUROPA PRESS) -
Un nuevo estudio realizado por investigadores de Intermountain Health (Estados Unidos) revela que los trastornos hipertensivos del embarazo (THE) aumentan significativamente el riesgo de complicaciones cardiovasculares -incluidos ataques cardíacos, accidentes cerebrovasculares, insuficiencia cardíaca y muerte- en los cinco años posteriores al parto. Los resultados se presentan en las Sesiones Científicas de la Asociación Americana del Corazón 2025 en Nueva Orleans (Estados Unidos).
El estudio revela que las mujeres que sufrieron hipertensión gestacional tenían una probabilidad significativamente mayor de desarrollar problemas cardiovasculares graves en comparación con aquellas que no la padecieron. Estos hallazgos subrayan la creciente evidencia de las últimas dos décadas que vincula la hipertensión relacionada con el embarazo con riesgos para la salud materna a largo plazo.
"Cualquier forma de hipertensión durante el embarazo aumenta significativamente el riesgo cardiovascular y el riesgo de muerte", detalla Kismet Rasmusson, enfermera especializada, investigadora principal del estudio y profesional de práctica avanzada del Programa de Insuficiencia Cardíaca Avanzada de Intermountain Health. "Este riesgo está presente en mujeres con hipertensión crónica antes del embarazo, y se agrava aún más cuando se combina con formas graves de trastornos hipertensivos del embarazo, como la eclampsia.
ACTORES QUE AUMENTAN LA VULNERABILIDAD
En este estudio retrospectivo, los investigadores analizaron 218.141 nacimientos vivos de 157.606 pacientes en 22 hospitales de Intermountain Health entre 2017 y 2024. Revisaron los registros médicos electrónicos para detectar diagnósticos de hipertensión crónica y trastornos hipertensivos del embarazo, como hipertensión gestacional, preeclampsia y eclampsia. Posteriormente, se realizó un seguimiento de las pacientes para detectar enfermedades cardiovasculares durante un promedio de cinco años después del parto.
Entre las principales conclusiones del estudio se incluyen que el 19,7% de los pacientes tenían un diagnóstico de HDP, y la mayoría de los casos ocurrieron durante el primer parto con feto vivo. Por otra parte, los pacientes con HDP presentaban significativamente más factores de riesgo cardiovascular, incluyendo obesidad, tabaquismo, diabetes, hiperlipidemia, depresión y un nivel socioeconómico más bajo.
Asimismo, la HDP se asoció más fuertemente con un mayor riesgo de insuficiencia cardíaca (riesgo de 3 a 13 veces mayor), pero también con accidente cerebrovascular (riesgo de 2 a 17 veces mayor), ataque cardíaco (riesgo de 3 a 7 veces mayor), enfermedad de las arterias coronarias (riesgo de 2 a 7 veces mayor) y muerte (riesgo de 1,4 a 4 veces mayor). La gravedad de los trastornos hipertensivos del embarazo (THE) se correlacionó con un mayor riesgo cardiovascular. Las mujeres con hipertensión crónica y eclampsia presentaron el mayor riesgo de sufrir eventos cardiovasculares futuros en comparación con aquellas sin THE.
A pesar de estas alarmantes estadísticas, muchas mujeres embarazadas siguen sin ser conscientes de los riesgos cardiovasculares a largo plazo asociados con los trastornos hipertensivos del embarazo.
"Debemos mejorar la identificación de las mujeres con estos factores de riesgo y garantizar que reciban la atención adecuada antes, durante y después del embarazo", finaliza Rasmusson. "Esto es especialmente importante para aquellas con formas graves de trastornos hipertensivos del embarazo".
Rasmusson destaca además la importancia de la atención multidisciplinaria para las mujeres en situación de riesgo. "Tradicionalmente, este ha sido el ámbito de los obstetras-ginecólogos y las matronas, pero nuestros hallazgos demuestran que se requiere la colaboración de todos".