MADRID, 21 May. (EDIZIONES) -
La estética sexual femenina, o ginecología estética y funcional, es una tendencia en constante crecimiento. "La mujer quiere saber, cada vez más, si sus genitales externos son normales", afirma doctor Rafael Sánchez Borrego, ginecólogo y director médico de la Clínica Diatros de Barcelona.
En los últimos años, se ha producido un incremento del 10 por ciento anual en la demanda de procedimientos de ginecología estética y funcional, tal y como se puso de manifiesto durante el primer workshop de España en el que se debatió sobre la conocida como ginecoestética o sex-estética femenina, celebrado durante la 11ª edición del Curso Diatros, que tuvo lugar recientemente en Barcelona bajo el lema 'Cuidando de la salud de las mujeres: iniciativas y retos'.
Sin ir más lejos, entre 2013 y 2015, en los Estados Unidos se registró un aumento del 70 por ciento en la realización de labioplastias, intervención encuadrada en el terreno de la cirugía íntima femenina. "La labioplastia es uno de los Top 20 de la lista de procedimientos estéticos que se realizan en los Estados Unidos", detalla el doctor Pablo González, especialista en Ginecología y Obstetricia del Hospital Militar Central de Colombia y ponente del workshop.
Hasta hace unos años las mujeres que demandaban estas intervenciones eran mujeres que se dedicaban al mundo del espectáculo erótico y también X; en la actualidad este tipo de intervenciones ya se van generalizando.
"Si una joven se pone un piercing en los genitales, lo primero que hace es enseñárselo a sus amigas. A día de hoy este genitalismo está más globalizado; ya no es marginal, por decirlo de algún modo", destaca el médico, quien señala que la percepción de la apariencia genital se ha dejado influenciar los medios eróticos y pornográficos que ha puesto de moda "mostrar mucho más los genitales", cosa que anteriormente no ocurría porque en las imágenes "había vello púbico y demás".
En su opinión, "un porcentaje no despreciable" de mujeres se sentirán en algún momento de su vida "incómodas con algún aspecto de su vulva, ya sea cosmético o funcional", y valorarán la posibilidad de someterse a un procedimiento ginecológico de corrección.
Según el director médico de la Clínica Diatros, en el ámbito de la ginecoestética o sex-estética femenina existen opiniones a favor y en contra, algo que no es nuevo si se recuerda que se trata de un debate que ya se ha vivido anteriormente con los primero aumentos de pecho.
"Es el mismo debate que apareció en un inicio cuando las mujeres querían modificar su pecho, tanto reduciéndolo como aumentándolo; algunos profesionales lo banalizaban pero, a día de hoy, la sociedad por completo tiene asumido que una mujer pueda modificar el tamaño de sus pechos, no sólo por un problema derivado de un tratamiento radical aplicado por una enfermedad, sino también por pura estética".
¿POR QUÉ UNA MUJER SE DECIDE POR LA MODIFICACIÓN GENITAL?
"Puede que la mujer quiera modificarlos por una cuestión estética, pero también hay pacientes que presentan alteraciones funcionales (dolor, molestias) debido a la forma o al tamaño de sus genitales externos, lo que se enmarcaría dentro de la esfera de la ginecología funcional", afirma el experto cuando se le preguntan por los motivos de esta intervención.
Existen varias razones que pueden empujar a someterse a un procedimiento de ginecoestética, ya que, tal y como recuerda a modo de ejemplo el doctor Sánchez Borrego, "un tratamiento quirúrgico o un procedimiento agresivo como la radioterapia pueden afectar la funcionalidad y la estética" de las partes íntimas de la mujer.
"Hay una línea muy fina entre la estética y la funcionalidad, que es la línea que precisamente debemos respetar para dar la adecuada indicación y el adecuado procedimiento", añade.
En cuanto al perfil, muchas mujeres pueden pensar en modificarlos o arreglarlos conforme a su forma de entender lo que puede ser más estético para ellas. En otros casos, es por comodidad ya que unos labios mayores de un mayor tamaño pueden perjudicar a muchas chicas que, tras la adolescencia, practican deportes, van en bicicleta o montan a caballo, y puede ser una molestia.
Otro perfil de solicitantes de intervenciones en los genitales externos remite a mujeres que han entrado ya en la época de la menopausia. Quieren mejorar esa zona de su cuerpo no únicamente por estética, sino por funcionalismo, dado que refieren mucha sequedad vaginal.