MADRID, 14 Oct. (EUROPA PRESS) -
La Federación Española de Cáncer de Mama ha publicado un manifiesto, con motivo de la celebración, el 19 de octubre, del Día Internacional del Cáncer de Mama, en el que solicita al Gobierno que salga elegido de las próximas elecciones generales, que se celebrarán el 20 de diciembre, poner "fin" a las diferencias en la atención sanitaria entre las comunidades autónomas.
Este documento pretende trasladar a la población y a las administraciones el sentir de las mujeres agrupadas en las 41 asociaciones de FECMA. Además, la organización ha contado este año con el apoyo de la Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM) y los Grupos de Investigación de Cáncer de Mama GEICAM y SOLTI.
"Nuestro objetivo es que se hagan las reformas necesarias para tener un sistema sostenible. La sanidad no puede ser un elemento de discordia sino una política de Estado, porque la protección de la salud es un derecho constitucional y un derecho igual para todos. Desde el movimiento asociativo de mujeres no nos resignamos a que la vida y la salud se contabilicen como un elemento presupuestario", ha comentado la presidenta de FECMA, Roswitha Britz.
En este sentido, ha reiterado su compromiso por garantizar una Cartera de Servicios única y común, con independencia de la administración gestora, como elemento de equidad. Es decir, un sistema que se manifieste como instrumento activo de cohesión social, igualdad y sostenible en el tiempo como parte de nuestro Estado de bienestar.
Asimismo, el manifiesto recoge además el compromiso de la Federación por conseguir un sistema de salud de gestión pública, que ofrezca una atención integral, personalizada, multidisciplinar y de calidad. Y hace una defensa para resolver las desigualdades sanitarias existentes entre Comunidades Autónomas.
"La equidad supone igualdad de acceso a las prestaciones, a los tratamientos y fármacos innovadores en un sistema público económicamente sostenible y, también, a un gasto homogéneo en todas las administraciones sanitarias. Por eso nuestro Sistema Nacional de Salud necesita corregir las diferencias en la financiación", ha recalcado Britz.
Dicho esto, ha insistido en la importancia de apoyar los ensayos clínicos y la participación activa del paciente, así como en la necesidad de invertir en investigación e innovación, ya que la mayor supervivencia se obtiene aplicando estos dos ítems. Además, ha destacado que la innovación permitirá avanzar en fiables métodos de diagnóstico, desarrollar terapias menos agresivas y más eficaces, disponer de medicamentos adecuados, superar algunos efectos adversos y garantizar una atención de calidad.
"Con más de 25.000 nuevos casos de cáncer de mama al año en España, podemos decir que entre el 80 y el 90 por ciento de las mujeres continúan libres de enfermedad cinco años después del diagnóstico y tratamiento de un cáncer de mama. Ello es debido a que hoy en día disponemos de muchas más herramientas para ayudar a nuestros pacientes que hace unas décadas", ha apostillado la miembro de la Junta Directiva de la SEOM, Montserrat Muñoz.
AVANCES "SOBRESALIENTES"
Por su parte, el miembro del Grupo GEICAM de Investigación en Cáncer de Mama, José Ángel García Sáenz, ha recordado que el diagnóstico precoz y la investigación están consiguiendo avances "sobresalientes" en esta enfermedad. De hecho, según los datos epidemiológicos de la última década los tumores se detectan en estadios más iniciales, cuando son más sencillos de tratar y tienen mejor pronóstico.
Esto se ha conseguido, entre otras cosas, gracias a los programas de cribado y a la investigación de nuevas alternativas terapéuticas; todo ello se ha traducido en una notable mejoría en la supervivencia de las pacientes aunque queda mucho camino por recorrer.
"Para seguir avanzando en el conocimiento y tratamiento de esta enfermedad es necesario un firme respaldo a la labor investigadora en oncología e impulsar la financiación de proyectos de investigación clínica. En nuestro grupo estamos trabajando en diferentes líneas, entre ellas la búsqueda de herramientas genómicas que permitan identificar el riesgo individual de cada paciente, la investigación de terapias dirigidas frente a los cambios diferenciales de las células neoplásicas, desarrollar tratamientos que permitan luchar contra el cáncer de mama desde dentro: revirtiendo la capacidad antitumoral del propio sistema inmunológico del individuo", ha explicado García Sáenz.
Del mismo modo, la presidenta del Grupo SOLTI de Investigación en Cáncer de Mama, Eva Ciruelos, ha comentado que para que exista un "verdadero" impulso en la investigación clínica debe haber un trabajo conjunto de todas las partes implicadas.
"Esto significa que tanto grupos de investigación como grupos de pacientes, entre otros, deben escucharse mutuamente y crear espacios de colaboración. En este sentido, SOLTI respalda lo expresado por FECMA en su manifiesto, en particular, su apoyo a los ensayos clínicos y a la necesidad de un paciente informado. Consideramos que ambos aspectos son fundamentales, no solo para estimular la investigación, sino también para lograr un mejor desarrollo del sistema sanitario y, en consecuencia, una respuesta efectiva para las pacientes. Y es precisamente en ello en lo que debemos continuar trabajando", ha enfatizado.
Por otro lado, los firmantes del manifiesto han mostrado su preocupación porque no se haya alcanzado un Pacto de Estado por la Sanidad, el cual blindaría sus elementos de sanidad pública y universal, la sostenibilidad, la cohesión, la suficiencia, la equidad, la financiación y la calidad.
También, han solicitado el derecho a una segunda opinión; a una información objetiva, veraz, completa y comprensible; a la atención específica de aquellas mujeres donde se manifiesta la relación entre fertilidad, maternidad y cáncer de mama y a la necesidad de registros homogéneos y actualizados de tumores.
Finalmente, han reclamado el derecho a una atención a los problemas laborales, a la mejor gestión de las listas de espera, a la rehabilitación física; a los cuidados paliativos; a los efectos de los síntomas de cronicidad y a la evaluación de los riesgos de presentar síndrome hereditario de cáncer.