MADRID, 18 Ene. (EUROPA PRESS) -
Expertos reunidos en la jornada 'Terapias biológicas en artritis reumatoide', organizada por la Sociedad Española de Reumatología (SER) y la Sociedad Marroquí de Reumatología, han recordado que "no todas" las pacientes con artritis reumatoide mejoran durante el embarazo.
No obstante, han reconocido que si la paciente en el periodo previo a la gestación se encontraba en remisión o baja actividad es más probable que la mantenga durante la misma. Por ello, han destacado la importancia de la planificación en el momento de la gestación en este tipo de pacientes.
"Preferiblemente, el embarazo debería planificarse tras haber mantenido en los meses previos una situación clínica de remisión o baja actividad. También es más probable el mantenimiento de baja actividad en el embarazo en pacientes con negatividad para factor reumatoide y ACPA (anticuerpos anti-péptidos citrulinados)", ha comentado la reumatóloga del Complejo Hospitalario Universitario de Pontevedra, Susana Romero Yuste.
Asimismo, prosigue, un porcentaje de pacientes tiene brotes que requieren medicación ya que la actividad alta de la enfermedad, además de suponer 'disconfort' y riesgo de evolución del daño estructural, se ha relacionado con peores desenlaces del embarazo. En estos casos, la experta ha recomendado contemplar el tratamiento con FAMEs que hayan demostrado ser seguros en estas circunstancias.
"En cuanto a los anti-TNF a, la ficha técnica los contraindica en embarazadas al no existir ensayos clínicos controlados. Cada vez, sin embargo, hay mas datos de registros e incluso algún estudio prospectivo de cohortes que no inducen a alarma en cuanto a su uso, si la situación clínica lo requiere. Aún así debe realizarse un estricto seguimiento clínico, no deben asociarse a metotrexate y sería recomendable suspenderlos a partir de la semana 30", ha apostillado.
LAS TERAPIAS BIOLÓGICAS SON UN "GRAN AVANCE"
Por su parte, la reumatóloga del Hospital Universitario Quirón-Dexeus y una de las coordinadoras del encuentro, Beatriz Yoldi, junto con los doctores Rafael Cáliz y Manuel Tenorio, ha recordado que la llegada de las terapias biológicas ha supuesto un "gran avance y cambio" en el abordaje terapéutico de los afectados.
Otro de los temas de mayor interés para los especialistas del país vecino ha sido la prevención antituberculosa: comorbilidad y vacunación. Y es que, las infecciones son uno de los principales factores de morbimortalidad en los pacientes con enfermedades reumáticas inflamatorias, destacando por su prevalencia y gravedad la tuberculosis.
"Esta infección es endémica en España y también en el Magreb con una incidencia, en esta región, de 83 a 88 casos por 100.000 habitantes. El aumento de tuberculosis en enfermedades inflamatorias se ve favorecido por el uso de las terapias biológicas. En este sentido, la puesta en marcha y desarrollo de la base de datos de la SER en biológicos y el manejo de la infección tuberculosa es de gran importancia, y esta experiencia puede servir de ayuda en la detección de infectados, quimioprofilaxis y seguimiento de estos pacientes", ha recalcado Yoldi.
Finalmente, durante esta jornada se han abordado otros aspectos como, por ejemplo, los mecanismos de acción y dianas terapéuticas de las terapias biológicas, revisión de guías, fallo terapéutico, e inmunogeneicidad, seguridad en neoplasias, estrategias para optimización de dosis o la llegada de los fármacos biosimilares, entre otros.