MADRID 6 May. (EUROPA PRESS) -
Expertos reunidos en el 'V Foro Cáncer de Ovario', organizado por PharmaMar en el Hospital Universitario Reina Sofía de Córdoba, han destacado la importancia de fomentar el diagnóstico precoz, tratar la enfermedad en centros especializados y desde una perspectiva multidisciplinar, así como favorecer el acceso a las nuevas terapias para mejorar el pronóstico del cáncer de ovario
"El cáncer de ovario es una enfermedad devastadora, aunque no es frecuente pues sólo supone un 4,8 por ciento de la incidencia de cáncer. Sin embargo, es la séptima causa de muerte por cáncer y la principal por tumores ginecológicos. Esto se debe fundamentalmente a que se diagnostica muy tarde en la mayoría de los casos. De hecho, el 75 por ciento de los tumores de ovario son detectados en fase avanzada debido a su escasa sintomatología. Esto impacta en su supervivencia que es del 70 y 90 por ciento a los cinco años para las mujeres en las que la enfermedad se detecta en estadio iniciales, y menor del 20 por ciento cuando el diagnóstico se realiza en estadios avanzados", ha explicado la coordinadora del foro, María Jesús Rubio.
A su juicio, adoptar medidas para favorecer un diagnóstico precoz de la enfermedad es fundamental para reducir esta mortalidad. Entre ellas, considera esencial la formación continuada de los profesionales sanitarios. "La formación continuada podría contribuir a que el médico de Atención Primaria tuviera presente los síntomas de alarma del cáncer de ovario meteorismo, distensión y dolor abdominal y alteraciones en la micción, entre otras, lo cual permitiría un aumento de diagnósticos en estadios precoces de la enfermedad. También es importante porque, tras el diagnóstico, debe pautarse un tratamiento adecuado mediante una cirugía citorreductora óptima, seguida de quimioterapia complementaria adecuada", ha añadido.
Asimismo, y aunque existe "mucho margen" para mejorar el pronóstico de la enfermedad y reducir la mortalidad asociada a la misma, la supervivencia del cáncer de ovario ha mejorado en la última década y se espera que esta tendencia continúe. En esta línea, el jefe del área Clínica de Oncología Ginecológica del Instituto Valenciano de Oncología (IVO) y presidente del Gynecologic Cancer Intergroup, Andrés Poveda, ha explicado que esta mejora se debe a los avances que se han producido en el abordaje de la enfermedad.
"En la actualidad, los pacientes tienen acceso a una cirugía adecuada realizada por especialistas en ginecología oncológica. También se han producido mejoras en el diagnóstico al tener mejor conocimiento de los distintos tipos de tumores que existen con la ayuda de la biología molecular y disponemos de un mayor arsenal de tratamiento médico y de terapias dirigidas que por fin han llegado a esta patología para quedarse", ha asegurado el doctor Poveda.
"MEJOR FUTURO" PARA LAS PACIENTES
Dicho esto, el experto ha comentado que las nuevas opciones de tratamiento auguran un mejor futuro para las pacientes con cáncer de ovario. "Tenemos cada vez más opciones que nos animan a ser optimistas con nuestras pacientes. Por ejemplo, sabemos de la actividad de trabectedina ('Yondelis') especialmente en pacientes parcialmente sensibles a platino, donde ha demostrado aumentar la supervivencia global. Además la llegada de los antiangiogénicos y de otras terapias son una gran noticia para nuestras pacientes, ya que podremos empezar a tratar a la carta el cáncer de ovario", ha enfatizado.
Por su parte, el jefe del servicio de Oncología Médica del MD Anderson Cancer Center y presidente del Grupo Español de Investigación en Cáncer de Ovario (GEICO), Antonio González, ha explicado que la aparición de nuevas terapias plantea nuevos retos en el abordaje de la enfermedad, y ha recordado que actualmente hay varias estrategias de tratamiento y el reto para el oncólogo es seleccionar la secuencia más ventajosa para la paciente.
"Existen diferencias en el abordaje de la enfermedad entre España y los países de su entorno. La cirugía, que es clave, no está desarrollada por igual, ni siquiera dentro de un mismo país. Tampoco es igual el acceso a diagnósticos de imagen, patológicos o moleculares, ni tampoco el acceso a los nuevos fármacos. En nuestro país tenemos un nivel bastante bueno, pero no podemos relajarnos ni en investigación ni en la exigencia del cumplimiento de Guías o Consensos Internacionales, como el que recientemente hemos actualizado en Tokio dentro del grupo mundial de cáncer ginecológico (GCIG)", ha asegurado el doctor Poveda.
Por ello, ha subrayado la importancia de que el cáncer de ovario se trate en centros especializados que dispongan de todas las disciplinas o especialidades necesarias para ofrecer un tratamiento global. "Los patólogos, radiólogos, biólogos moleculares, etc. deben estar familiarizados con la enfermedad. Es también clave en el tratamiento del cáncer de ovario la participación de psicólogos o fisioterapeutas, por poner ejemplos concretos", ha añadido.
Finalmente, los expertos han señalado que otro de los puntos fundamentales a abordar es la investigación. A su entender, si no se destinan los recursos suficientes a investigar sobre el cáncer de ovario no se podrá conocer mejor la enfermedad, ni desarrollar medicamentos cada vez más eficaces para tratarlo. Esto, a su parecer, requiere de un esfuerzo público y privado.
"La investigación es costosa, pero siempre devuelve lo invertido. Sufragar el conocimiento es en mi opinión lo que acaba diferenciando a las sociedades, a los países, y debe ser apoyado por el estado y también por fundaciones o entidades privadas, como es habitual en otros modelos de sociedades que funcionan en el primer mundo. Si nosotros mejoramos podemos además ayudara a sociedades con menos recursos, es de justicia lo mires por donde lo mires", ha zanjado Poveda.