MADRID, 14 Jun. (EUROPA PRESS) -
La genética juega un papel importante en la determinación de la aparición de la menopausia y la supervivencia, según ha mostrado un estudio por investigadores estadounidenses y que ha sido publicado en la revista ' Menopause'.
La menopausia suele aparecer un año después de haber tenido el último ciclo menstrual y, de media, ocurre a partir de los 52 años, si bien algunas mujeres la tienen más tarde y otras más temprano. Aunque la menopausia puede adelantarse como resultado de varias afecciones como fumar, haber recibido quimioterapia o tener un índice de masa corporal elevado, la edad de la menopausia suele estar influenciada por antecedentes familiares.
Ante esto, los expertos han querido identificar diversas variantes genéticas asociadas a la edad tardía de la menopausia y a la supervivencia de las mujeres. De esta forma, comprobaron que las mujeres que a los 40 años podían tener hijos tenían hasta cuatro veces más probabilidades de vivir hasta los 100 años, lo mismo que ocurrió a sus madres.
"Se ha encontrado que las variantes genéticas asociadas a la menopausia tardía están asociadas con una vida más larga. Aunque la menarquia temprana y el número total de años reproductivos no se han asociado con un envejecimiento más lento, la menopausia tardía (potencial reproductivo más largo) parece estar asociada con un envejecimiento más lento", han zanjado los investigadores.