MADRID, 14 Oct. (EUROPA PRESS) -
Cada año se producen en España 25.000 nuevos casos de cáncer de mama, aunque su supervivencia se sitúa ya en el 85 por ciento, según ha informado la Asociación Española Contra el Cáncer (AECC) con motivo de la celebración de la jornada 'Diálogos AECC'.
Se trata de un cáncer paradigmático puesto que una mayor concienciación social sobre su detección precoz y la reducción del riesgo de desarrollarlo, así como un mayor esfuerzo en investigación, han logrado que sea uno de los tumores con mejor pronóstico y mayores índices de supervivencia y cronificación.
Ahora bien, según ha explicado la psicooncóloga de la AECC, Patrizia Bressanello, los índices de malestar general de los familiares de paciente de cáncer son incluso mayores que los de los pacientes. "Un proceso de cáncer conlleva muchos cambios y eso no es fácil. Genera angustia e inseguridad y los familiares y cuidadores piensan que no van a saber cómo hacerlo. Necesitan de todo nuestro apoyo", ha argumentado.
De hecho, la trabajadora social de la AECC, Raquel del Castillo, ha explicado que los familiares de enfermos de cáncer tienen problemas sociales y laborales, ya que "en muchas ocasiones" la familia tiene que adaptarse a los cambios de roles, "sin preparación previa". Además, prosigue, los cuidadores no conocen sus derechos y por la dedicación plena al familiar enfermo se olvidan de pedir ayuda, cuando son el pilar para el paciente.
IMPACTO EN LA SEXUALIDAD Y EN EL ÁMBITO FAMILIAR
Asimismo, en las pacientes, el cáncer de mama provoca un impacto en distintos aspectos como, por ejemplo, en la imagen corporal, la sexualidad o, dentro del ámbito familiar, el cambio de roles que provoca un diagnóstico de cáncer y los efectos secundarios como el linfedema.
Existen cambios físicos evidentes en los pacientes con cáncer de mama debido a los tratamientos médicos que pueden incluir mastectomías. Alguno de estos cambios son pérdida o aumento de peso, caída del cabello, cicatrices o pérdida del pecho.
De la misma manera, un diagnóstico de cáncer de mama puede afectar a la sexualidad ya que los tratamientos pueden provocan alteraciones emocionales, menopausia inducida, cansancio físico o dolor, sin contar con los aspectos emocionales como sentimiento de pérdida de atractivo físico, ansiedad, depresión o estrés.
También, un diagnóstico de cáncer de mama puede provocar alteraciones en el sentido del necesario cambio de roles en la unidad familiar. Así, si la afectada es la madre de la familia, probablemente su cónyuge y sus hijos tendrán que asumir las tareas, que antes asumía la paciente, durante el tiempo que dure la administración de los tratamientos.
Finalmente, la AECC ha informado de la puesta a la venta de las gafas rosas que sirven para recaudar fondos para investigar el cáncer de mama. Bajo el lema, 'El reflejo de tu apoyo', la asociación busca además el compromiso de toda la sociedad para trasmitir todo el apoyo a los pacientes y familiares que están pasando por un proceso oncológico.