MADRID, 12 Ago. (EUROPA PRESS) -
Un grupo de investigadores de la Universidad Estatal de Michigan (EE.UU) ha puesto de relieve que una de cada ocho mujeres de entre 14 y 19 años sufre coerción reproductiva para quedarse embarazada por parte de sus parejas, mediante la manipulación de condones o la amenaza de abandono.
Para el desarrollo del estudio, publicado en la revista 'Obstetrics & Gynecology', el equipo ha utilizado los datos de 550 adolescentes sexualmente activas de un ensayo realizado previamente en ocho centros escolares en California (EE.UU).
Durante el desarrollo del trabajo, Heather McCauley, profesora en el Departamento de Desarrollo Humano y Estudios Familiares (HDFS) de la Universidad Estatal de Michigan, ha destacado que no se encontraron diferencias en los comportamientos de búsqueda de cuidados entre las niñas que sufrían coerción reproductiva y las que no.
Así, los investigadores han puesto de relieve la "importancia" de que los médicos sepan detectar la coerción reproductiva en las pacientes más jóvenes para adaptar correctamente su evaluación clínica e intervención. Además, la experta ha puesto de relieve las diferencias respecto a la coerción reproductiva en función de la etnia, ya que las mujeres negras son más propensas a sufrir abusos.
En este sentido, el estudio ha concluido que hasta el 17 por ciento de las adolescentes ha asegurado sufrir algún tipo de abuso físico o sexual y que las mujeres que experimentaron coerción reproductiva tienen cuatro veces más riesgo de padecer otras formas de explotación. Por otra parte, se ha destacado que quienes estaban expuestas a este tipo de coerción solían tener una pareja cinco años mayor que ella o más.
"Estos hallazgos ponen de relieve la frecuencia de la coerción reproductiva y otras formas de abuso en las relaciones de las adolescentes, sin embargo, sus indicios pueden ser difíciles de detectar para los médicos y padres", ha concluido la experta, quien ha destacado la "importancia" de que los padres mantengan conversaciones con sus hijos sobre comportamientos de relaciones saludables.