MADRID 16 Ago. (EUROPA PRESS) -
Administrar probióticos durante el embarazo puede aportar diversos beneficios a las madres y a sus bebés, como mejoras en su sistema inmunológico y en su comportamiento, según un estudio dirigido por el Centro Médico Wexner y la Facultad de Medicina de la Universidad Estatal de Ohio (Estados Unidos), cuyos resultados se han publicado en 'Brain, Behavior, and Immunity'.
Los probióticos son microorganismos vivos beneficiosos, como las bacterias, que ayudan a mantener sanos los sistemas digestivo e inmunológico. Numerosos estudios han confirmado los beneficios de los probióticos, que se consideran seguros durante el embarazo. Ahora, este estudio, realizado en ratones, ha puesto de relieve las ventajas para mujeres y bebés durante el embarazo.
"Estos resultados sugieren que ciertos probióticos administrados a las madres durante el embarazo pueden mejorar el comportamiento de sus hijos y pueden afectar el metabolismo de aminoácidos comunes en nuestras dietas. Los probióticos también pueden ayudar a contrarrestar los efectos negativos del estrés prenatal", ha explicado la autora principal del estudio, Tamar Gur, directora becada del Programa de Investigación de Salud de la Mujer Soter e investigadora del Instituto de Investigación de Medicina Conductual y el Departamento de Psiquiatría y Salud Conductual de la Universidad Estatal de Ohio.
En concreto, los científicos han descubierto que un probiótico específico, Bifidobacterium dentium, puede cambiar la forma en que el cuerpo procesa ciertos aminoácidos, como el triptófano, que ayuda durante el embarazo a controlar la inflamación y el desarrollo del cerebro.
"Tenemos pruebas sólidas de que este probiótico específico ayudó a reducir los problemas relacionados con el estrés tanto en las madres como en sus hijos, lo que incluye ayudar a los bebés a ganar peso y mejorar su comportamiento social", ha explicado Gur, quien también es profesora asociada de psiquiatría, neurociencia y obstetricia y ginecología en la Universidad Estatal de Ohio.
El equipo de investigación ha estudiado cómo el estrés prenatal puede provocar un desarrollo cerebral anormal y cambios de comportamiento en los hijos. Hasta ahora, han descubierto que el estrés está relacionado con cambios en la inflamación cerebral y el metabolismo de los aminoácidos, así como con reducciones a largo plazo en el comportamiento social y microbiomas anormales en los hijos.
Este estudio mejora la comprensión sobre la influencia de los microbios intestinales y los probióticos en el metabolismo de los aminoácidos, así como respecto a su ayuda con los problemas de comportamiento e inmunológicos relacionados con el estrés prenatal. El estudio también destaca los numerosos beneficios de este probiótico específico, incluso sin la presencia de estrés.
"Ahora, nuestro objetivo es comprender los mecanismos que se esconden detrás de estos cambios y explorar formas de prevenir o tratar estos efectos", ha apuntado Gur añadiendo que, "dado que el estrés prenatal es común en muchos embarazos, queremos desarrollar métodos para reducir sus efectos negativos".